Son más de 40 años de trayectoria los que respaldan a Rebecca Jones sobre el escenario, pero no por eso se siente infalible, razón por la que siempre está dispuesta a probar cosas nuevas.
“Me aburro si no hago o aprendo algo diferente y muchas veces es a través de cosas raras, claro, basada en la seguridad que tengo como actriz, aunque aún no se me quiten los nervios después de tantos años, porque cada vez que salgo al escenario me digo ‘¿por qué me gusta esta sufridera?’”, bromeó Jones.
Rebecca Jones se dice muy entusiasmada con su participación en la obra Conejo blanco, conejo rojo, de Nassim Soleimanpour, porque es como volver a sus inicios, cuando sus maestros la hacían experimentar. En este caso, ella recibirá el libreto justo en el momento de la función en La Teatrería. “Sé que mis años de experiencia no me van a defraudar, sabré torear lo que venga”, aseguró.