Integrantes de la comunidad cultural del estado de Chiapas recordaron al poeta Joaquín Vásquez Aguilar, “Quincho”, fallecido en enero de 1994. Uno de ellos fue el escritor y periodista cultural Enrique Hidalgo, quien compartió: “El 8 de enero de 1994, yo trabajaba en el Instituto Chiapaneco de Cultura. Ese día nos avisaron que Joaquín Vásquez Aguilar lo encontraron muerto en su departamento. En 1986 fui su único alumno del Taller de poesía que daba en el CREA (Consejo Nacional de Recreación y Atención para la Juventud)”.
Por su parte, el académico y poeta Mario Nandayapa contó: “Fue mi amigo muy cercano, además de ser mi asesor cuando fui becario del Centro Chiapanecos de Escritores. En muchas ocasiones se quedó a dormir en mi casa. Cuento además con todos sus libros dedicados que generosamente me dio. Un año antes de su muerte, en enero de 1993, estuvimos en una cantina en el parque, en el marco de la Fiesta de Enero de Chiapa de Corzo, tomando cerveza con él y con Lalo Martínez Pola, y hoy lo evoco”. Asimismo, mostró algunas fotografías del poeta oriundo de Cabeza de Toro, Tonalá, que pertenecen a su acervo personal.
De igual forma, la página de Facebook del Gobierno Municipal de Tonalá, Chiapas, 2021-2024, publicó un video de poco menos de 5 minutos en el que aparece la cronista Sofía Mireles Gavito, quien expone que Joaquín Vásquez Aguilar es uno de los poetas más importantes y más reconocidos a niveles estatal, nacional e internacional, debido a que su obra ya ha sido traducida al inglés y al francés. Nacido el 15 de agosto de 1947, sus estudios básicos los culminó en su natal Cabeza de Toro, y continuó en la Normal del Icach. Fue parte de las brigadas de Teatro Campesino y trabajó al lado del maestro Luis Alaminos.
También fue coordinador de talleres literarios en la Universidad Autónoma de Chiapas y en el Instituto Chiapaneco de Cultura, así como profesor en el Instituto de Ciencias y Artes de Chiapas, y colaboró en la revista Adraca. El Instituto Chiapaneco de Cultura lo premió por su trayectoria poética. A lo largo de su vida escribió libros como Cuerpo adentro; Aves; Vértebras; Casa; Cuadernos perdidos y En busca del paraíso perdido.
Su obra ha sido reunida en dos volúmenes publicados en 2010, uno por la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, titulado Poesía reunida, y el segundo por la Universidad Autónoma de Chiapas y el Consejo Estatal para las Culturas y las Artes de Chiapas, con el nombre de En el pico de la garza más blanca. La poesía del “Quincho” invita a la reflexión del ser, de la vida, del tiempo que se fue, y está impregnada de “unas ganas inmensas de retornar a quién sabe donde”.