Recuerdan a Pita Amor con lectura poética
La poeta fue recordada con las voces de Patricia Martínez, Elia Domenzain y Martha Zavaleta, junto al actor Manuel Ojeda. Cortesía

Como parte del homenaje por el centenario del nacimiento de la poeta mexicana Guadalupe Amor (1918-200), en la sala Manuel M. Ponce, del Palacio de Bellas Artes, se llevó a cabo una lectura dramatizada de sus poemas. El espectáculo, llamado Sagrado sonambulismo, fue escrito y dirigido por Miguel Sabido.

Las actrices Patricia Martínez, Elia Domenzain y Martha Zavaleta, junto con el actor Manuel Ojeda, como narrador, dieron voz a la “intensa poética” de quien fuera reconocida en su momento por su hermosura, pasión y talento.

Durante la polifónica lectura dramatizada se evocó la forma de ser y el modo de vida de Pita Amor: “Dulce, furiosa, frágil, loca, arrebatada, lúcida, portentoso volcán en erupción. Guadalupe Amor es dueña de su propio mito. Las comparaciones serán siempre innecesarias, porque como señaló Alfonso Reyes: la obra de Pita Amor es un caso mitológico, legendario, de ella. La parte fundamental y trascendente es su poesía, que remonta a los más altos vuelos, que se interna en los abismos más hondos”.

Esta poetisa excepcional, leyó Ojeda, “se ha situado por méritos propios junto a Sor Juana Inés de la Cruz, Santa Teresa, San Juan de la Cruz, (Federico García) Lorca y (Rubén) Darío. Ella misma, con soberbia, se ha encargado de definir su obra: ‘Dueña de la tinta americana. Donde pongo la pluma, pongo la eternidad’. Su vida toda fue un gran acontecimiento. Deslumbrante y trágico. Aterrador y jubiloso. Su poesía es persecución y huida”.

“Yo soy mi casa”, “La lucha contra el polvo”, “Visitaciones del demonio” y “El combate con Dios” fueron algunos de los poemas a los que se dio lectura. Para concluir, Miguel Sabido destacó la importancia de reivindicar la vida y obra de Pita Amor, quien fue una mujer “hermosa, insolente, aristócrata, culta, inteligente, desbordada y terriblemente compleja. Llena de una intensidad que hace cimbrar el alma”.