"MdR. * CP. La principal característica de la gastronomía comiteca reside en la permanencia de varios platillos espanoles, obviamente de herencia colonial que difícilmente se encuentran en otras regiones de la República Mexicana: butifarra, chanfaina, pebre y olla podrida, entre otros.

Estos guisos se distinguen de sus ascendientes ibéricos, según Leticia Román, autora del ""Calendario gastronómico de Comitán"", por un ingrediente esencial: su sabor específicamente mexicano, el cual se deriva tanto de los componentes americanos como de la sazón de las cocineras vernáculas.

La butifarra es un embutido de carne molida de cerdo elaborado con nuez moscada, pimienta y un poco de anís. La chanfaina es un delicioso caldo de menudencias de carnero.

El pebre de lengua de res se elabora con frijol colorado con carne de puerco o de res.

La gastronomía de Comitán, sin embargo, es mucho más vasta y otros de sus rasgos distintivos consiste en su abundante variedad de botanas o antojitos, de ascendencia espanola e indígena que raramente se encuentran en otras partes de México.

Entre éstos figuran los picles, compuestos de zanahoria y cebolla en vinagre con especias; los palmitos de corazón de coyol; las tostadas de carne molida; las tortillas con asiento acompanadas de frijol con verdura y de asiento de manteca de chicharrón.

Los chinculguajes son unas gorditas hechas a base de maíz nixtamalado, rellenas de frijoles refritos molidos con cilantro y picante y se sirven con queso espolvoreado.

Hay tamales de momón, envueltos con hoja de hierba santa y frijol molido; de hoja y rellenos de mole; pitaúl con masa de frijol, entre otros.

Los postres son igualmente muy variados y entre ellos sobresalen los chimbos, dulces de yema de huevo; los nuégados, las tabletas de cacahuate, los gaznates, los turrones y panes.

Entre las bebidas figuran el comiteco, mezcal de agave y el atole de granillo, el cocoatol de masa de maíz agria y por supuesto la mistela, licor afrutado en curtido.

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