En 1996, mientras otros festivales le cerraban la puerta, Ozzy Osbourne decidió crear una propia, en la que no solo su música pudiera oírse, sino que fuera el escenario para todas aquellas bandas que no encontraban lugar en los espacios tradicionales.
Así nació el Ozzfest, un festival que escribió su propio capítulo en la historia de la música en vivo. Pero este es solo un pasaje en la carrera, de más de cinco décadas, de Osbourne, la cual llegó a su fin la mañana de este martes, cuando el llamado “príncipe de las tinieblas” dio su último aliento.
Desde que debutó con Black Sabbath, en los 70, la figura de Ozzy estuvo rodeada de excesos, rumores de brujería y constantes enfrentamientos con la industria, haciendo de la controversia y su forma de hacer música, su mejor característica en palabras de Eduardo “Nat” Contreras, vocalista de la banda de heavy metal Ágora. “Cuando escuchabas a Ozzy, sabías que era él. Su estilo de producción, esos ‘overdubs’ tan característicos lo hacían inconfundible”, dijo el músico mexicano.
Ver a Osbourne en vivo, explicó Gus Santana, exguitarrista de Ángeles del Infierno, era una experiencia paranormal. Y es que, si había dudas de él como artista, desde el primer segundo en el que pisaba el escenario, se disipaban. “Su locura, su autenticidad… Ozzy era único. Esa imagen con el torso desnudo, el pelo loco, los tatuajes… y esa voz. Muchos dicen que no era un gran cantante, pero su voz era perfecta para sus canciones. Nadie más suena bien cantándolas. Solo él”, contó.
Vio en el rechazo su más grande oportunidad
El Ozzfest, al igual que la carrera de su creador, comenzaron del rechazo. Ozzy no era bien visto por las temáticas de sus canciones y cuando intentó tocar en Lollapalooza lo hicieron a un lado por “no encajar”. Sin embargo, no estaba solo, además de sus fans tenía a una figura que, hasta el final de sus días, se convirtió en su más grande apoyo: su esposa, Sharon Osbourne.“Sharon fue clave en su carrera. Sin ella, Ozzy no habría llegado a convertirse en el ícono que es”, explicó “Nat”.