Selena Gómez está en su mejor momento

Selena Gómez no está preocupada por los comentarios que se puedan hacer de ella o acerca de su peso, pues parece encontrarse en uno de los momentos más estables de su carrera, ya que ha encontrado un equilibrio entre lo emocional y lo profesional, situación que le llevó muchos años. Por ello, cuando caminó por la alfombra roja de los Globos de Oro, no solo lució un vestido de diseñador despampanante, sino una inmensa sonrisa, debido a que iba acompañada de su hermana menor.

Desde que la cantante de 30 años lanzó My mind & me, el documental acerca de su vida, y el cual narra una de las etapas más complicadas que ha atravesado; el diagnóstico del lupus y el peso de la fama a su corta edad, ha mostrado su lado más humano, pues como ella misma reconoce, desde que debutó en el mundo de la televisión, como una niña del mundo de Disney, nunca se sintió identificada ni parte del grupo de las jóvenes actrices que, así como ella, soñaban con brillar. Sin embargo, el sueño por alcanzar la fama le trajo facturas, debido a que llegó a sentir mucha presión y un cierto sentido de competitividad con sus compañeras.

Del mismo modo, mientras el tiempo transcurría y otras estrellas lograban relaciones amorosas estables, Selena confesó que comenzó a experimentar mucha presión de no lograr lo que sociablemente se ha establecido que tiene que suceder cuando una persona se convierte en adulta, por lo que cayó en un estado de depresión. “Nunca encajé con un grupo genial de chicas que eran celebridades. Mi única amiga en la industria realmente es Taylor (Swift), así que recuerdo sentir que no pertenecía”, confió a Rolling Stone en noviembre pasado.

La depresión de la artista se agudizó cuando fue diagnosticada con lupus, en 2015, a partir de ahí Selena no solo fue sometida a un sinfín de tratamientos que la agotaron emocional y físicamente, sino que comenzó a adentrarse en un camino oscuro, donde cerró su corazón a todas aquellas personas que la amaban y se preocupaban por ella, como ocurrió con Raisa Francia que, en 2017, le donó un riñón, cuando la actriz se encontraba en un momento muy vulnerable de salud, sin embargo, tras recuperarse, Selena comenzó a beber mucho, causando la molestia de su amiga y donante.

A lo largo de los años, Selena ha demostrado su gran vulnerabilidad, con la cual se ha identificado todas y todos sus seguidores, pues ha sido una de las voceras en tanto señalar lo tóxicas que pueden llegar a ser las redes sociales, al generar ansiedad por la constante comparación que puede existir entre unas personas y otras, motivo por el cual, decidió cerrar todas sus cuentas en 2019.

Sin embargo, en su más reciente aparición en los Globos de Oro, Gómez parece haber dejado atrás esos miedos e inseguridades que la acompañaron por tantos años, pues en los últimos meses, las publicaciones que hace sugieren que se encuentra en uno de sus mejores momentos, compartiendo fotos de viajes, con amistades y, en todas ellas, con una gran sonrisa en el rostro.