Terapia emocional para niños

Es frecuente escuchar a padres y madres hablar con tranquilidad de que sus hijos reciben ayuda, ya que si existe alguna dificultad, es adecuado proporcionarle al niño la asistencia necesaria

¿Cuándo es necesaria la terapia emocional para niños?

Existen diversas situaciones que pueden producir en el niño emociones intensas, difíciles de manejar para él. Presta atención a sus conductas y actitudes, pues esta es la mejor manera de comprobar si está teniendo dificultades emocionales.

Es posible que tenga cambios de humor repentinos, que se sienta apático y sin interés en actividades que antes le agradaban. Puede que se encuentre distraído y manifieste problemas de atención en la escuela. Tal vez esté irritable, tenga rabietas incontrolables o se muestre desafiante o retraído.

En general, las dificultades en el colegio, en el hogar o con los amigos pueden esconder un problema emocional. Pero los siguientes son algunos de los eventos que, con más frecuencia, causan sufrimiento emocional en los niños:

¿Cómo se trabaja con los niños en terapia emocional?

En primer lugar, es necesario saber que la terapia con niños es totalmente diferente a la de los adultos y que está completamente adaptada a su edad y sus capacidades. Los siguientes son algunos de los principales elementos que la componen.

Vínculo con el terapeuta

Es imprescindible que el niño se sienta a gusto con la persona que va a acompañarlo en su proceso. Ha de transmitirle confianza y seguridad y han de tener una buena sincronía. Es posible que el primer terapeuta al que acudas cumpla con estos requisitos, pero también puede ser que no lo haga. Así, no temas cambiar y probar con otros profesionales hasta dar con aquel que te haga sentir cómodo.

Juego

La terapia con niños incluye elementos propios que la hacen más accesible para los pequeños. Tanto en la fase de diagnóstico como en la de tratamiento propiamente dicho se emplean el juego, el dibujo y diversos muñecos y juguetes. El niño se encuentra en un espacio seguro y distendido en el que se le permite expresarse de un modo que le resulta natural y ameno.

No pienses que tu hijo tendrá que permanecer sentado en una silla conversando sobre asuntos que no comprende o respondiendo preguntas intrincadas. En realidad, es un proceso con el que los niños suelen sentirse muy a gusto, ya que todo el formato de la terapia se adapta a ellos.Inteligencia emocional

El objetivo de la terapia emocional es desarrollar en los niños la inteligencia emocional, una cualidad que ha demostrado estar relacionada con la felicidad, la satisfacción vital, un mejor rendimiento académico y relaciones sociales más satisfactoria.

Así, a través de diversos juegos y dinámicas, se enseña al niño a reconocer e identificar las distintas emociones. Se le recuerda que todas ellas son válidas (está bien estar enfadado o triste en ciertos momentos) y se le ayuda a expresarlas de una forma adecuada.