El Circo Atayde Hermanos, el cual brindó su primera función el 26 de agosto de 1888, “fue fundado por mi bisuabuelo Aurelio Atayde, en Mazatlán, Sinaloa. Los inicios, como en todo, fueron muy difíciles, hay varias anécdotas”, cuenta Alfredo Atayde Chávez, director general del circo.

Hace más de cien años el Atayde recorría el país en ferrocarriles, así se transportaba a los animales, uno de los principales atractivos del espectáculo. Todo iba bien hasta que comenzaron a perder caballos por la Revolución.

“No me puedo imaginar recorrer todo el Amazonas, ahorita es más cómodo ir de un lugar a otro. El circo tuvo que irse de México por la Revolución, así que estuvo por Centro y Sudamérica por más de 20 años”, recuerda Alfredo.

A su regreso al país la gente pensaba que se trataba de un espectáculo extranjero, “pero no, somos cien por cierto mexicanos y actualmente se puede decir que somos el circo o negocio familiar más antiguo de toda América”.

El secreto de mantenerse durante tanto tiempo vigente, dice, se debe a que día con día de reinventan, “renovarse o morir, siempre hemos dicho”. Así fue cuando nació una nueva ley en contra del maltrato animal, la cual prohibió, a partir de 2015, el uso de animales en el circo.

De esta forma los pequeños dejaron de ver a los leones, tigres, elefantes, jirafas, osos, caballos, cebras, dromedarios y hasta focas haciendo acrobacias y malabares, y el aroma del aserrín y la paja desaparecieron.

“Indiscutiblemente, no puedes suplir a un animal, pero sí puedes darle al público un espectáculo cada vez de más calidad en cuanto a la creación escénica, producción, buen audio, buena iluminación y los mejores artistas”, destacó.

Cuando comenzaron a sacar los animales del circo, Alfredo recuerda que mucha gente les aplaudió la acción; sin embargo, otros tantos dejaron de ir. “Fue un poquito difícil, pero aquí estamos, retomando la tradición con toques de gran producción. Cuidamos mucho eso, pero la esencia del circo es la misma”, destacó.

Este año, el Atayde Hermanos celebra su 130 aniversario y por ello ofrecerá una corta temporada, del 27 de abril al 6 de mayo, en la Carpa Astros de la Ciudad de México.