Venden documentos históricos pese a denuncia
La denuncia fue por una carta de Miguel Hidalgo al militar Juan Antonio Romero. Cortesía

Pese a que el Archivo General de la Nación interpuso una denuncia para detener la venta de 75 lotes de documentos con indicios de tratarse de Patrimonio Documental de la Nación, Morton consumó la subasta “Libros y documentos sobre la Independencia de México, el Primer Imperio y la Primera República”.

Entre los documentos estaba el lote 77, una carta de Miguel Hidalgo en la que se invitaba al “Sr. Coronel Narciso de la Canal para Formar Parte del Movimiento Armado. Cuartel General del Ejército Americano en Dolores, octubre 4 de 1810”; sin embargo, cuando llegó el momento, el moderador de la puja dijo que ese lote estaba “retirado”.

El lote 77 que planeaba venderse entre 100 mil y 150 mil pesos fue el único retirado de la subasta de 252 lotes, y pese a la denuncia que presentó el AGN sí se vendieron varios documentos, entre ellos la carta de José María Liceaga, José María Morelos y Pavón, y José María Cos.

La carta “dirigida al Comandante Juan Antonio Romero sobre la Formación de una Academia Militar. Uruapan, noviembre 22 de 1814”, estaba ubicada como el lote 95, y fue vendida por 96 mil pesos, segunda cifra más alta que se alcanzó durante el evento.

Otro documento vendido fue el lote 99, integrado por dos cartas de Agustín de Iturbide —una de 1808 dirigida al Coronel Conde de Casa Rul, y la segunda dirigida al Capitán M. Agustín de Elorza con mensaje para el Teniente Coronel Manuel de G. y Zamora, en 1816—, por 19 mil 200 pesos.

La subasta se llevó a cabo pese a que el AGN presentó una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República contra Morton y quienes resulten responsables por la probable comercialización de Patrimonio Documental de la Nación.

Uno de sus argumentos fue que el artículo 77 de la Ley General de Archivos establece que el AGN debe ser informado cuando se realicen o se tenga la intención de realizar traslados de dominio de documentos históricos de interés público, y en caso de omitirse dicha notificación, el AGN podrá solicitar la expropiación de dichos documentos; sin embargo, “no hubo ningún contacto en lo absoluto”, dijo Comunicación Social del Archivo.