El Vive Latino está dispuesto a adaptarse a los cambios que existen la industria musical, eso sí, sin perder su identidad, o al menos eso es lo que aseguró el director del evento, Jordi Puig, en conferencia de prensa.
Una parte de ello es hacer uso de la tecnología, como la Inteligencia artificial; mientras que la otra tiene que ver con la convocatoria de bandas emergentes para sumarlas al elenco. “Esta tecnología puede ser un arma de doble filo (la Inteligencia Artificial). Si creamos la IA es para que nos ayude, no para dejarnos sin trabajo como creen muchos; por eso esta edición se inspira en la tecnología y se manifiesta a favor de ella”, agregó.
De esta idea parte la imagen de la edición 2024, que utiliza imágenes pixeladas que se asemeja a la de los videojuegos de los años 80, cuando la tecnología comenzaba a formar parte de la vida cotidiana de la sociedad. “El arte merece una postura y es lo que el Vive Latino ha hecho, ha tratado de proponer algo en cada edición. En todo este tiempo ha habido cambios, el mundo se ha globalizado gracias a la tecnología, por eso tratamos de hacer una reapropiación cultural de esa tecnología, de esa estética que impresionaba y ahora ya no”, contó Rubén Ochoa, creador del arte del festival.
El cartel en sus distintas ediciones ha sido criticado por traer constantemente a los mismos grupos, un ejemplo de ello es Panteón Rococó, que se presentará por décima vez en el evento. Pero destacan que entre las 88 bandas que forman parte del cartel, 49 se presentan por primera vez, algo que busca reflejar el intento por refrescar la oferta musical del Vive Latino.
“Me agrada el equilibrio que tiene este festival con bandas de gran calibre y la presencia de bandas nuevas con propuestas frescas que, para mí, indican el gran talento, libertad de expresión y libertad de creación”, expresó Felipe Maldonado miembro de La Castañeda.
Respecto al cambio de sede, los organizadores aseguraron que es un gran reto, pero, a pesar de ello buscarán que el festival no pierda el sentido de pertenencia que habían alcanzado. “Nos toca cambiar de sede, estamos trabajando para aterrizar en este gran espacio, queremos que no cambie su esencia, su personalidad. Lo esencial del festival va seguir ahí para que nos sintamos como en casa, con espacios de descanso, con escenarios que puedan recibir a miles de personas, pero sobre todo satisfacer musicalmente a los seguidores”, dijo Puig.
En esta edición se presentarán bandas de 13 países distintos, entre estos Argentina, Colombia, España, Venezuela, Perú y México, respetando que la principal convocatoria sea de bandas latinoamericanas, pero añadiendo a otras como Bad Religion, Kings of Leon (tras la salida de Paramore) y Scorpions.