La pequeña Yazmín recibió las aguas del bautismo en una emotiva ceremonia religiosa en la que sus padres prometieron velar por su alma. Para celebrar este importante acontecimiento se ofreció una recepción en conocido salón de eventos, en donde aprovecharon para festejar sus primeros tres años de vida. Esa agradable mañana se dieron cita amistades y familiares por ser una ocasión tan especial