Afrodisio Pitongo, hombre proclive a la concupiscencia de la carne, le pidió a la linde Dulcibel la dación de su más íntimo tesoro. Ella se negó: “Le prometí a mi m...
Si su nombre fuera Hércules tendría derecho a pedir que no lo llamaran por el diminutivo. Pero se llama Andrés. Resulta natural, entonces, que le digan Andy. Andrés...
Tengo muchos recuerdos. Más, muchos más que olvidos. Uno de ellos acudió ayer a mi memoria sin que lo llamara. Departía yo con una noviecita en la hermosa Alameda d...
Grande fue la sorpresa, y mayor el enojo de don Poseidón cuando vio a Glafira, su hija, efectuando en la sala con su novio el antiguo rito de la generación. Antes ...
“Mi papá era muy macho”. Eso dijo con voz áspera, ríspida y ácida un cierto mozalbete. Añadió en seguida, dulcificando el tono: “Pero yo salí a mamá”. Pues bien: po...
Después de la debacle electoral de este domingo la 4T deberá hacer un severo examen de inconciencia. La mendaz jornada fue un timo en el cual la inmensa mayoría de ...
Se llamaba Pascual Nieves Palomares. Amigo mío de juventud, vivía en un pequeño pueblo del centro de mi natal Coahuila. De vez en cuando nos invitaba a pasar alguno...
Desde siempre he dedicado los domingos a narrar cuentos de humor. Con eso pretendo hacer que mis cuatro lectores descansen del comentario político que a diario infi...
“Vengo a pedirle la mano de su hija”. Don Poseidón, granjero acomodado, escuchó la petición que le hizo el novio de su hija y respondió: “¿La mano? Se ve, joven, qu...
Afrodisio Pitongo le dijo en una fiesta a don Cucoldo: “¿Ve usted a aquella mujer? Anoche le hice el amor. Fue una pésima experiencia; la señora no pudo haber estad...
Una de las más tristes paradojas que registrará la moderna historia de nuestro país, es que López Obrador se valió de la democracia para destruir la democracia. En ...
Entre los desaparecidos habrá que contar a México. La frase es muy sonora, y las frases demasiado sonoras tienden a ser falsas, pero a ésta lo sonoro no le quita la...
¿Acabarán alguna vez los devaneos eróticos de don Chinguetas? Creo que nada sosegará sus rijos. Es casado, pero piensa como Quintiliano: In varietate voluptas. En l...
No. Mi negación es clara y es explícita. Yo no iré a votar en la elección judicial del próximo domingo. Tal decisión es mía, de mí, por mí y para mí. No pretendo im...
Nunc bibamus. “Ahora bebamos”. Así me dijo mi amigo John O’Boyle luego de que los sinodales que conocieron su tesis recepcional en la Universidad Interamericana de ...
El siquiatra le informó a su paciente: “No es que tenga usted complejo de inferioridad, señor Wormilio; lo que pasa es que realmente es inferior”. La tragedia del 6...
“Envié a mi hijo a la universidad a que estudiara una carrera -le contó un rico señor americano a su amigo-, y todo lo que hace es beber, jugar póquer con sus compa...
Carezco de cartas credenciales para compadecer a alguien. Yo soy quien necesita ser compadecido por mis innumerables fallas de pensamiento, palabra, obra y omisión....
Don Gerontino, señor que llevaba sobre sí 80 calendarios, contrajo segundas nupcias -era viudo- con Pompona, mujer en flor de edad y pródiga en geografía anatómica....
Calificar de lamentable el suceso del “Cuauhtémoc” es lamentable obviedad. El choque del navío contra el puente de Brooklyn devino en tragedia que cobró la vida de ...
Don Cucoldo regresó de un viaje antes de lo esperado, y encontró en la recámara a su esposa, presa de singular agitación, en la cama y sin más cobertura que las de ...
El jefe de la tribu de antropófagos regresó de la cacería de misioneros sin haber cobrado ni una sola pieza, y sorprendió a su esposa en trance de refocilación carn...
A un cierto comerciante de mi ciudad, Saltillo, le preguntaban: “¿Cómo te ha ido?”. Solía responder: “Bien y mal, para saber de todo”. A mí me ha ido más bien bien ...
“¿Cómo me pides que haga eso?” -le reclamó con enojo en la cama la recién casada a su marido. Y luego, preocupada, añadió: “A menos que hayas leído mi diario”. Hace...
En la oscuridad de la sala cinematográfica se oyó el reclamo de protesta de la hembra del pulpo: “¡No me agarres ahí!”. “Pero, mi vida -se defendió el octópodo-. ¿P...
Afrodisio le preguntó a la linda chica en el Bar Ahúnda: “¿Cuántas copas se necesitan para ponerte beoda?”. “Con tres tengo -respondió la joven-. Pero no me llamo B...
El hijo adolescente le pidió a su padre: “Háblame de sexo”. “¡Qué voy a saber yo de sexo! -contestó el señor-. ¡Tengo 20 años de casado!”. La linda chica le propuso...
Ramos Arizpe es una antigua y laboriosa población conurbada ya con mi ciudad, Saltillo. Recio y tenaz es el carácter de sus habitantes. Se decía que cuando una muje...
La joven esposa le dijo con ext·tico acento a su marido: “¡Tus besos me saben a gloria!”. “Son imaginaciones tuyas -se turbó él-. ¡Te juro que hace meses no la veo!...
Hace ya mucho tiempo de esto que en seguida narraré. Tan momentáneos son los momentos, y tan fugitivas las horas y la vida, que de todo hace ya mucho tiempo, inclus...