Cañón del Sumidero
En las últimas semanas hemos visto imágenes del Cañón del Sumidero, uno de los más importantes lugares turísticos de Chiapas, conteniendo miles de toneladas de basura que flotan en sus aguas, consecuencia de todos los desechos sólidos que se tiran en distintos municipios asentados en las márgenes del río Grijalva.
La falta de conciencia ciudadana es causa fundamental en este tipo de situaciones, pero también responsabilidad de las instituciones de trabajar en programas de fondo para encontrar soluciones definitivas y no solamente de corto plazo. Es más, la mayoría de los ríos presentan algún grado de contaminación no solamente por la basura que llega a los mismos, sino también por las descargas de drenajes de aguas negras de las ciudades al no existir suficientes plantas de tratamiento.
Las autoridades estatales y municipales de Tuxtla Gutiérrez ya realizan trabajos de limpieza para resolver el problema que se genera desde la capital del estado, aunque también de los municipios de Chiapa de Corzo, Acala, Villaflores, Ocozocoautla, Suchiapa, Villa Corzo, Berriozábal, Chiapilla, Nicolás Ruiz, Soyaló, Usumacinta y San Fernando, entre otros. Hemos podido observar que sobre el agua se encuentran miles de botellas de plástico y madera, que son arrastrados por las corrientes de agua de afluentes que van a dar al Grijalva y por las lluvias.
En el Senado de la República, el legislador chiapaneco Luis Armando Melgar acaba de proponer un punto de acuerdo para que las instancias federales del ramo atiendan la problemática de fondo, siendo necesario realizar programas de concientización hacia la sociedad y que los residuos de los municipios cercanos al Cañón del Sumidero se depositen en lugares adecuados para evitar que vayan a los ríos, como sucede ahora, y en ello mucho tienen que ver la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la de Desarrollo Agrario, Territorio y Urbano (Sedatu), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y hasta la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Aparte de todo ello, en el Parque Nacional se ha dado una serie de invasiones irregulares; siete de ellos del 2013 a la fecha, que abarcan unas 40 hectáreas, no solamente provocan daños a los recursos naturales de la zona sino también generan parte de esa basura que con las corrientes de agua van al cañón. La problemática es seria y debe atenderse en forma integral por autoridades federales, estatales y municipales.
Pero no se trata solamente de la contaminación por residuos sólidos sino también por las aguas negras que se generan en casi todos los municipios que finalmente van a dar a los ríos, porque la mayoría de ellos carece de plantas de tratamiento y aquellos que sí tienen, no funcionan a toda su capacidad instalada. Eso ocurre con las existentes en Tapachula, Tuxtla Gutiérrez o Palenque, solamente por mencionar algunas, manejadas por los sistemas de agua potable.
En el exhorto hecho por Melgar Bravo a las dependencias del Gobierno Federal incluye uno en particular a la Conagua en el que le solicita que ponga en funcionamiento las plantas de tratamiento de aguas residuales de los municipios que integran la Cuenca del Cañón del Sumidero, lo que significa que la mayoría de ellos carecen de las mismas, como ocurre en la mayor parte del estado.
El Cañón del Sumidero es uno de los principales atractivos de Chiapas, generador de cientos de empleos en la región del centro de la entidad, receptor de miles de turistas regionales, nacionales y extranjeros al año, pero la contaminación que registra, sobre todo en esta temporada, deja muy mal parada la imagen de nuestro estado, y por más trabajos de limpieza que se hagan, mientras no exista un programa de atención integral para evitar que los residuos vayan a los ríos se seguirá presentando esta problemática, por tanto, el gobierno en sus tres niveles y la sociedad en su conjunto deberá poner lo que le corresponde fortaleciendo la cultura del cuidado ambiental, si es que queremos mantener nuestra riqueza natural intacta.
A escena
Comerciantes y empresarios afectados por las lluvias de hace diez días en Tuxtla Gutiérrez ya empezaron a recibir los apoyos por parte del gobernador Manuel Velasco Coello, quien acompañado del alcalde Fernando Castellanos Cal y Mayor, entregó un millón 500 mil pesos, directo en mano y que buscan reactivar lo más pronto posible la economía de las familias. Es más, en colonias y barrios siguen los operativos de atención instrumentados por los tres órdenes de gobierno, incluso la Secretaría de Gobernación emitió la declaratoria de desastre y con ello la entidad podrá contar con acceso a recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), lo que agilizará a la rehabilitación y reconstrucción de viviendas, negocios y espacios públicos que sufrieron daños… Por cierto, en Tapachula el gobernador Manuel Velasco entregó una unidad de transporte público especial para personas con discapacidad que operará el DIF Municipal. Durante la entrega estuvo la presidenta del organismo, Marisol Cajica y el alcalde Neftalí del Toro Guzmán, estableciendo que se trata de mejorar la calidad de vida de este sector e impulsar la igualdad de derechos… Familias cuyos integrantes carecían de acta de nacimiento en el municipio de Berriozábal han enviado reconocimientos al Gobierno del Estado por haberlos ayudado para contar con el documento gracias a las gestiones a través de la fundación “Una Ráfaga de Ayuda”, que encabeza Andrea Hernández Fitzner, ante la Dirección de Registro Civil. Ellos son chiapanecos y mexicanos, que ahora ya cuentan con el documento que les brinda nacionalidad, nombre y apellido. Ese tipo de acciones se deberían replicar en otros municipios en donde todavía persisten hasta adultos mayores que carecen de acta y por ende oficialmente no existen y no pueden acceder a programas institucionales… Hasta la próxima.