En entrevista para EL UNIVERSAL, el Dr. Jorge Torre, director general de Comunidad y Biodiversidad, A.C., responde a preguntas sobre la pesca en el mar de Cortés, Pacífico mexicano y mar Caribe. La pesca en México está en crisis. La sobreexplotación e ilegalidad impactan los recursos marinos y millones de familias. ¿Qué hacer? 

El desorden de la pesca en México es innegable, como lo es su importancia socioeconómica. Hoy hay 300 mil pescadores y pescadoras, quienes sustentan a dos millones de familias en 10 mil comunidades pesqueras rurales con menos de 15 mil habitantes cada una. Los pescadores se adaptan rápidamente a las crisis y adoptan nuevas herramientas de comunicación, como redes sociales y tecnologías móviles. Intercambian conocimiento, se conectan con compradores y consumidores, y comparten soluciones.

En contraste, las autoridades tardan mucho formulando políticas pesqueras. Hay un desfase con las prácticas de pesca cotidianas. La incapacidad, improvisación y burocracia gubernamental contrastan con la eficiencia con que las comunidades pesqueras innovan. Este es uno de los mayores desafíos de la pesca en México. Los pescadores tienen propuestas y soluciones, solo tenemos que escucharlos.

¿Cómo ha impactado a los pescadores la pandemia del covid-19?

Las comunidades costeras son particularmente vulnerables. La inseguridad, la carencia de atención médica, el desempleo y el crimen organizado obstaculizan la gestión sostenible de los recursos marinos.

 En 2020 hicimos 1, 500 entrevistas a 300 pescadores de 102 comunidades de los 17 estados costeros del país para conocer las consecuencias del covid-19. Los impactos han sido devastadores. La mayoría no tenía recursos para responder a la pandemia. Les quedó claro que no pueden atenerse a que les llegue ayuda externa. Aunque muchos comercializaron sus productos en redes sociales, no todos tienen acceso a ellas. El internet y los teléfonos celulares son herramientas indispensables.

¿Por qué es importante la equidad de género en la pesca, una actividad tradicionalmente dominada por hombres?

He participado en muchas reuniones con el sector pesquero: siempre hemos sido los mismos hombres repitiendo lo mismo, cometiendo los mismos errores. Los resultados hablan por sí mismos. La mayoría de la pesca la realizan los hombres, pero el sistema pesquero no es exclusivo de ellos. Hay siete hombres por cada mujer empleados directamente en la pesca, pero la proporción de los empleados indirectamente es 1:1. Menos de 10% de mujeres pertenecen a una cooperativa u ocupan puestos directivos. Están atrapadas en una red de inequidad. Sin igualdad de género en la toma de decisiones perdemos conocimiento, el balance entre opiniones diferentes y la oportunidad de adoptar soluciones creativas.

¿Cuál es su mensaje para el presidente Andrés Manuel López Obrador?

 Señor Presidente, durante 30 años he escuchado del sector pesquero lo mismo: no hay ordenamiento, vigilancia ni recursos para investigación científica y tecnológica. Nada cambia, sin importar el partido político. Cada uno trae ideas “nuevas”, da apoyos temporales pírricos y sólo mide los avances en kilos de pescado. Dejan las cosas peores que cuando llegaron.

 Ser pescador es uno de los pocos trabajos legítimos en que se arriesga la vida cada día. Apoyar con dinero individualmente tal vez sirve para paliar el día a día, pero el sector necesita un plan transexenal fundamentado en ciencia y sostenibilidad. Tenemos una Ley de Pesca y Acuacultura Sustentables: ¿por qué no aplicarla, en lugar de seguir dando vueltas en círculos y hablando sin ton ni son?

@ovidalp