Pocos eventos nos han hecho experimentar en carne viva la relevancia del combate a la discriminación racial como los lamentables atentados en El Paso, Texas, el pasado fin de semana. A partir de éstos se ha constatado la persistencia de crímenes motivados por odio racial. Como consecuencia, la condena a cualquier tipo de discurso de superioridad de raza ha sido unánime, por lo que cabe preguntar: ¿Cuáles son las acciones que México lleva a cabo para combatir este tipo de discriminación?

Durante esta semana una compacta delegación de funcionarios de México que me honro encabezar, estaremos en la sede de las Naciones Unidas en Ginebra para sustentar el informe de las acciones que México ha tomado para implementar la Convención para Erradicar Todas las Formas de Discriminación Racial, que constituye uno de los más nobles esfuerzos globales por lograr la igualdad legal y sustantiva entre todas las razas. Entre los preceptos que establece, se encuentran la definición de discriminación racial, la obligación de los Estados a prevenir la discriminación, la prohibición de los discursos de odio y la necesidad de que los países adopten políticas públicas económicas, sociales y culturales, dirigidas a erradicar la discriminación.

En lo relativo al discurso de odio el artículo 410 del Código de Procedimientos Penales Federal establece que si la víctima de un asesinato pertenece a un grupo vulnerable por etnia o raza, el juez puede tomar medidas para considerar esto una motivación de odio e integrarlo como agravante. Además en junio de 2018 se publicó una reforma al artículo 20 de la Ley Federal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, con la finalidad de otorgar al Conapred atribuciones para prevenir y erradicar el discurso de odio.

A partir de los movimientos migratorios recientes, el Conapred elaboró el documento Mitos y Realidades sobre la Caravana Migrante. En este documento se analizan las expresiones de xenofobia, racismo y clasismo con el objetivo de erradicarlas. También en mayo de 2019 se instaló la Comisión de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes Migrantes y Solicitantes de Refugio, la cual tiene como principal propósito garantizar el interés superior de la niñez durante todo el proceso migratorio.

Entre las políticas que buscan, además de evitar el odio y la discriminación, fomentar una sociedad incluyente, la presente administración ha integrado al Programa Nacional de los Pueblos Indígenas un nuevo objetivo que establece la obligación de fortalecer y revitalizar las culturas, lenguas, valores, saberes y demás elementos que constituyen su patrimonio cultural y biocultural.

Por su parte, la Secretaría de Cultura realiza acciones de visibilización, sensibilización y difusión del patrimonio cultural de las comunidades indígenas.

El espíritu de la Convención establece que la discriminación debe ser combatida atendiendo el problema integralmente y de raíz; y segundo, que es a través del diálogo y el entendimiento entre todas las razas como podremos erradicar la discriminación.

En el prevalente contexto de discriminación racial en México y en el mundo, y antes las gravísimas consecuencias en vidas humanas y descomposición social que estos complejos fenómenos acarrean, cabe pensar en el multilateralismo como uno de los caminos más viables hacia el reconocimiento mutuo necesario para que no exista xenofobia.

El ejercicio de sustentación del informe de México para cumplir con la Convención es una oportunidad para identificar los progresos, reconocer la situación que el país presenta en el combate a la discriminación racial, y por supuesto, identificar los desafíos para la implementación de las recomendaciones que los organismos internacionales nos han hecho.

@marthadelgado