¡Qué desorden!

Las ansias de algunos políticos coletos por posicionarse con miras a las elecciones municipales y legislativas del próximo año están desestabilizando y ocasionando muchos desajustes en el de por sí desajustado ayuntamiento de San Cristóbal de Las Casas.

Lo que se ha visto en las semanas recientes es un jaloneo fuerte entre el grupo que encabezan la alcaldesa Jerónima Toledo Villalobos y el síndico Miguel Angel de los Santos Cruz y los algunos regidores de oposición que responden a intereses de aspirantes a la candidatura a la presidencia municipal.

Al grupo de opositores se han unido increíblemente, regidores que forman parte de la planilla de coalición que encabezó Toledo Villalobos, que junto con otros de sus compañeros fue postulada por Morena, y los demás por los partidos del Trabajo y Encuentro Social. Luego se agregaron las plurinominales.

Se entiende que las regidoras plurinominales del PRI y el Verde, por ejemplo, sean oposición y peleen por defender espacios para sus respectivos partidos que trata de ganar algo en los próximos comicios, pero que lo hagan quienes triunfaron en el mismo que encabeza la alcaldesa, parece fuera de lugar.

Las pugnas se incrementaron en las semanas recientes cuando el grupo opositor comenzó a machacar con que el nombramiento de la directora de Desarrollo Urbano, Ana María Pérez Alvarez, fuera aprobado por el cabildo. Con las facultades que tiene, la presidenta municipal la designó como encargada y así podría seguir por mucho tiempo.

En la sesión del cabildo del martes se había acordado que un día después, en una sesión extraordinaria, se trataría el tema. Sin embargo, parece que algunos regidores se olvidaron del asunto y retomaron el caso de la destitución del director de Obras Públicas Gerardo Sántis Gómez y del titular de la Casa de la Cultura, Alexis Díaz López.

En la votación lograron destituir a Gómez Sántiz, pero con su voto de calidad, Jerónima logró mantener en el cargo a Alexis. Cuando menos en esa sesión se olvidaron de Ana María. Lo que algunos de los regidores de oposición buscan es colocar en Obras Públicas al arquitecto Fabián, cercano al diputado Juan Salvador Camacho Velasco, tal vez el más fuerte aspirante hasta ahora a la candidatura por Morena a la alcaldía coleta.

De todos modos, ayer se informó a esta Rotonda Pública que la destitución por mayoría del director de Obras Públicas está en el aire porque se promovió un amparo por “la ilegal remoción”, por lo que se está en espera de la resolución del juzgado de Distrito.

De acuerdo con la información, la Ley de Desarrollo Constitucional en materia de gobierno y administración municipal establece que la remoción de un director sólo procede a solicitud de la presidenta municipal con la aprobación del cabildo y en este caso Toledo Villalobos no la solicitó, sino que fue una regidora, por lo que “el acto es nulo”, pues “falta el requisito de procedencia, es decir, la solicitud de la presidenta”.

Da la impresión de que la alcaldesa ha sido muy condescendiente con sus opositores en la comuna, por lo que necesita actuar antes de que se siga deteriorando la administración municipal. Hace falta operación y oficio político para que la alcaldesa tenga mayoría en el cabildo.

Varios de los aspirantes a la silla municipal están muy adelantados en los tiempos y ya andan en campaña, por lo que las autoridades correspondientes deberán de estar muy atentas.

La desestabilización sólo daña a San Cristóbal, pero ya se sabe que lo que mueve a todos los miembros del ayuntamiento son los intereses personales.

Se nota mucho desorden y falta de armonía en el seno del ayuntamiento coleto y eso está ocasionado que las cosas, de por sí lentas, caminen más despacio.

Es cierto que se percibe que en este ayuntamiento existe más diálogo y todos los regidores se pronuncian sin mayores problemas. Hasta la regidora plurinominal, Linda Higuera Gutiérrez, se expresa ahora, cuando no lo hacía en la pasada administración, en la que se desempeñó como síndica.

A esta columna llegó la versión de que existe un subejercicio de recursos que están disponibles, pero que inexplicablemente no han sido aplicados, por lo que de continuar tal situación hasta el 31 de marzo, el dinero podría ser devuelto, lo que sería muy grave, pues significaría que faltó capacidad para ejercerlo en obras.

Lo que la población lamenta es que mientras en el ayuntamiento se están peleando por intereses políticos y económicos personales, muchos problemas como el de la inseguridad, siguen sin resolverse de fondo.

Y desgraciadamente, lo más probable es que en lugar de hacer equipo para sacar adelante al municipio, los dos grupos en el ayuntamiento seguirán en sus posiciones, buscando acomodarse para las elecciones del año próximo, sin que les importe mucho la población.

En fin, habrá que esperar para ver cómo siguen las cosas y si los dos grupos se ponen de acuerdo y dejan de hacer campaña cuando menos este año y se ponen a trabajar, ya que las necesidades de San Cristóbal son muchas.

A la fecha, por ejemplo, no se han construido obras importantes, más que pavimentación de algunas calles y el entierro sanitario, que, es cierto, vino a solucionar el problema de la basura. Esa es la obra más importante. Fin.