Deudas de muerte

Gota a gota

Arenas movedizas

El Ángel de Tuxtla

1.- El 03 de julio (2024) llegaron a Chiapas 750 integrantes más del Ejército Mexicano y Guardia Nacional para, junto a autoridades locales, reforzar las tareas en contra de la delincuencia organizada. Los habladores, que seguramente padecen alogia y baja autoestima, señalan al gobierno de complicidad con el hampa. 

Esos habladores son prueba fehaciente de que Dios tiene un sentido del humor muy negro. No sé si usted me entendió, querido lector. Y si no, le invito al Café Avenida para explicarle. 

En Rancho Nuevo, sede de la VII Región Militar y 31a. Zona Militar enclavada a 16 kilómetros del centro de San Cristóbal, me han informado que la misión es preservar la paz pública y el Estado de Derecho, tan necesarios en estos días turbios que zangolotean al orbe.

Hay una política llamada “cero impunidad”. Se han desmembrado pandillas delictivas que, a lo largo de los años, se gestaron en mandatos anteriores y hasta hubo hombres del gobierno metidos en el cochinero. Habitaban el paraíso mientras nosotros, indefensos, vivíamos en la agorafobia.

Gota a gota

2.- De este programa me llaman la atención algunas aristas: a).- El combate a las redes que trafican fentanilo, droga que, según expertos, es 50 veces más potente que la heroína y cien veces más que la morfina. No puede estar en las calles matando. 

b).- La captura de 11 colombianos que operaban la extorsión bajo el modelo de préstamos denominados “gota-gota”, el cual deriva en actos de violencia, intimidación y homicidio.  

Se les conoce como “deudas de muerte”, se extiende entre los microempresarios, las señoras del mercado o gentes atormentadas por alguna deuda, válgase la redundancia. Es transitar arenas movedizas y sale peor el remedio que la enfermedad.

Ofrecen mil pesos pagaderos a 2 meses dando 60 pesos diarios y, finalmente, uno termina liquidando 3 mil  200 pesos. Eso es sólo un ejemplo porque pueden darle diez, 50, cien mil pesos. ¿Dónde, cómo nace la ruta del dinero?

Luis es joven y guapo, 29 años. Un día aceptó 12 mil pesos. Trabajaba de bartender en un lujoso restaurante del poniente de Tuxtla. 

Aquel individuo misterioso, también joven, llegaba sólo. Se sentaba en la barra. Tomaba margaritas o cócteles Cosmopolitan comiendo varitas de apio. Bien vestido. Le hacía pláticas al chico para ganarse su confianza. Y la función del bartender es precisamente manejar la psicología social e, incluso, flirtear con la mirada.

Muy raro, pero si un cliente le caía bien, Luis también era sexo-servidor. Ojo, no es un gigoló.  Ni el sueldo ni las buenas propinas le alcanzaron para saldar el préstamo. Tuvo que huir a una ciudad muy al norte del país.

Valientes

c).- “¡Suéltenlo, o se los carga la v…”! grita un malviviente rabioso armado de una poderosa metralleta. Lanza ráfagas al aire. Se dirige a 15 soldados que, horas antes, han capturado a “El Duranguillo”, jefe de una célula criminal en Altar, Sonora. Julio, 2022.

Los 15 heroicos soldados resistieron cinco horas el ataque de 60 criminales, sí, 60, cuyo líder previamente ofreció diez millones de pesos al comandante militar para dejarlo libre. Entre tiros y olor a pólvora la atmósfera se convirtió en el infierno. 

Un militar de alto rango que platicó conmigo a cambio de reservar su identidad, afirma que el valor de los soldados mexicanos no sólo les permite afrontar con éxito cualquier riesgo, sino salvaguardar la vida de las familias. Y lo remata con una frase coloquial: “Hay que tener muchos huevos”. 

El Turcom

3.- Mire, en el Campo Militar Turcom, Rutilio Escandón Cadenas y el comandante de la 31ª Zona Militar, Román Villalvazo Barrios, atestiguaron la destrucción de armas confiscadas a fin de evitar que sigan siendo parte de hechos delictivos; en las manos equivocadas, esas armas representan peligro y violencia. 

Se destruyeron 550 armas de diferentes características y calibres, de las cuales 299 son largas y 251 cortas; 662 cargadores y 52 mil 397 cartuchos. Qué tal eso…

Ángel de Tuxtla

En Las Brisas Loma Larga, una colonia ubicada sobre los confines de Chiapa de Corzo, el alcalde electo de Tuxtla Gutiérrez, Ángel Torres Culebro caminó, platicó y escuchó la voz de sus conciudadanos pues, dijo, las familias tuxtlecas “no merecen esperar, merecen la justicia social que les fue negada por muchos años”.

Ahí, en Las Brisas Loma Larga, nunca un político o funcionario había llegado para no mancharse los mocasines. Urge dar certeza jurídica a la propiedad de los colonos

“La primera responsabilidad del amor es escuchar”, decía el filósofo Paul Tillich. Por eso Ángel recorre las colonias de Tuxtla en lugar de apoltronarse en la molicie tras ganar el proceso electoral del 2 de junio.

Cuando el mundo enfrenta una crisis de valores, Ángel es un ser humano empático de esos en peligro de extinción. Le llaman el Ángel de Tuxtla…

Ya asoman las primeras luces de lo que será el nuevo Tuxtla con el Plan 4T.