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Hoy Escriben - Húbert Ochoa

Sólo para enterados

El caso de Misael

Venta de plazas

Irán a la cárcel

Fraude millonario

1. Misael es un maestro de educación primaria que, si bien está soltero, debe mantener a su madre diabética. Del padre recuerda poco, era un hombre borracho y los dejó cuando él tenía 12 años, ahora es de 28. Un hermano menor padece una condición especial y también integra el núcleo familiar.

Vive en la colonia CCI, de Tuxtla Gutiérrez, un complejo urbano de muchas carencias, lleno de perritos callejeros y ahí todavía se cuentan leyendas fantásticas, como esa de que, por las madrugadas, a las 3:13, recorre las calles empedradas la carreta de San Pascualito tirada por un esqueleto que va fumando enorme puro y produce un chirrido escalofriante. Anuncia la muerte.

Nunca ha andado en la bola vandálica porque, dice, un maestro debe ser ejemplo para los niños. Mientras encuentra empleo de docente, carrera que él estudió no por coyuntura, sino por vocación, se volvió un multitasking. 

Puede hacer chalán de mecánico, a veces realiza arreglos de plomería o electricidad “porque llevar la papa al hogar es imprescindible”. Según datos del INEGI, hasta marzo de 2025 un 34.12 por ciento de la población mexicana se encuentra en “condiciones críticas” por no tener un salario fijo.

 La estafa

2. Misael siempre tiene sus documentos en un folder de plástico, bien organizados, pues de manera recurrente se echa sus vueltas a la subsecretaría de educación federalizada y al SNTE en busca de una oportunidad laboral. Doña Micaela, su madre, no deja de rezarle a San Judas Tadeo.

En una de esas conoció a un sujeto que solo le dijo llamarse Julián, “el licenciado Julián”, quien le ofreció gestionar una plaza magisterial por “los conectes que tenía arriba, con los mero mero”. Sin embargo, no sería gratis, ya que “el licenciado Julián” le pidió 50 mil pesos.

Misael regresó emocionado a casa. Su mamá gestionó algo de dinero prestado en el vecindario, pero el chico tiene un primo que vive en los yunaites y ahí estaba la tabla de salvación. De inmediato le llamó por teléfono. Platicaron. Misael pudo convencerlo y, a los tres días, ya tenía el dinero que le había solicitado “el licenciado Julián”. Con ese primo jugaron de niños. ¿Cómo iba a negarle un favor?

Contactó al susodicho huizachero y quedaron de verse a las 13 horas. Misael le entregó primero el dinero y luego las copias de sus documentos. “En una semana tienes tu plaza”, le prometió. Todo fue una estafa y del “licenciado Julián” ni sus luces. Agosto de 2024. 

 En alerta

3. El secretario de Educación, Roger Mandujano Ayala, informó que la dependencia se mantiene alerta al llamado de la Fiscalía General del Estado para presentar las pruebas requeridas por la presunta venta de plazas en el sector educativo, cometida por particulares.

“No tiene que ver con funcionarios de esta administración, sino con personas que se hicieron pasar por servidores públicos, falsificaron documentos e incluso mi firma”, explicó Mandujano Ayala.

Detalló que la denuncia fue presentada ante la Secretaría de Honestidad y Función Pública, a cargo de Ana Laura Romero Basurto, donde se integró un expediente turnado a la Fiscalía General del Estado. 

“Nosotros estamos cuidando el debido proceso y atentos para ofrecer las pruebas necesarias en su momento”, señaló. 

Mandujano Ayala indicó que desconoce si existen más denuncias relacionadas con esta práctica en el sistema educativo estatal, pero subrayó que la Secretaría Anticorrupción da seguimiento al tema de las personas que fueron engañadas con plazas falsas.

A la cárcel

“Este es un delito con víctimas directas, donde hubo aportación de dinero a cambio de una plaza. Ahora corresponde a la Fiscalía perseguir el delito y sancionar a quienes resulten responsables”. 

La Secretaría de Educación y la Sección 40 del SNTE instalaron una comisión mixta para atender diversas problemáticas del sector educativo estatal. Si bien su función principal no es la asignación de plazas, reiteró el compromiso de actuar con legalidad y transparencia. 

“Si existen funcionarios dentro de la secretaría que hayan incurrido en irregularidades, deben ser denunciados ante la Fiscalía, la Secretaría Anticorrupción y esta misma dependencia. Un funcionario que participe en actos de corrupción no solo debe ser cesado, sino también enfrentar un proceso penal”. 

Gran fraude

Y es que, en el pasado, casos como el de Misael ocurrieron de manera escandalosa porque, en efecto, hubo una complicidad entre coyotes y funcionarios educativos creando una especie de delincuencia organizada. Una plaza, apócrifa, podría costar hasta 190 mil pesos.

Ricardo Aguilar Gordillo, secretario de educación (2012-2018), fue señalado de encabezar una red de corrupción y haber hecho negocios por más de 300 millones de pesos.  

Aguilar dirige actualmente el Partido Redes Sociales Progresistas, donde maneja a su arbitrio casi 20 millones de pesos que salen de nuestros impuestos. Qué tal eso…