ERA rompe lastres
El caso de María
El loco Salazar
Buitres carroñeros
1.- Qué historia. Le cuento: Autoridades sanitarias de Chiapas admitieron una negligencia operativa luego de que una mujer indígena, en labor de parto, fue impedida de reingresar al Hospital de la Mujer, ubicado en San Cristóbal.
Entonces se agolpan en mi memoria los recuerdos ingratos de la tragedia entre noviembre de 2002 y enero de 2003, donde murieron 34 bebés por la apatía del entonces gobernador Pablo Salazar Mendihuchía, un hombre feo, de mirada siniestra que esconde detrás de gruesas gafas blancas. En la viva representación del diablo, descendiente de Herodes, un auténtico cancerbero.
Por este caso, al Ombudsman Pedro Rúl López Hernández le provocó la cacería políaca de Salazar con sendas averiguaciones previas, dos atentados -uno casi mortal, a tiros en su casa- y, al final tuvo que salir huyendo una madrugada que una lluvia fina y ligera cubre la capital, es una atmósfera aterradora.
Con el Síndrome de Hubris a flor de piel, el loco Salazar es un sujeto que debería seguir en prisión. Cierto, se le encarceló por un peculado de 104 millones de pesos, pero falta la matanza de los neonatos del hospital de K de Comitán. Eso sigue impune.
Se trata de un expediente policial abierto (más de 9 mil fojas) y, también, una herida que no cicatriza. Salazar debió estar en prisión al menos cien años. Hoy se pasea campante en San Cristóbal o tomando café capuchino en el Toks de plaza del sol, aquí en Tuxtla Gutiérrez.
El caso de María
2.- Originaria de Oxchuc, María llegó al hospital de San Cristóbal. Tras ser valorada, se le indicó que el alumbramiento tardaría varias horas; ella decidió caminar dentro del edificio.
En algún momento salió a comprar agua tardando, quizá, 20 minutos y al intentar entrar nuevamente un guardia de seguridad le negó el acceso. Ahí empezó una trama que casi termina en su muerte.
La mujer tuvo que permanecer en el parque San Bartolomé, cercano al hospital, donde el parto iba a ocurrir sin asistencia médica. El incidente fue grabado y difundido en redes sociales provocando una ola de críticas y preocupación sobre los riesgos que enfrentaban María y su criatura.
Ante la presión social, personal hospitalario acudió al parque y trasladó a María al área de atención, donde dio a luz a un hermoso y robusto bebé. Según el informe oficial, ambos se encuentran estables.
Excusas
3.- El error fue del guardia de seguridad al negar el reingreso de María y se implementarán medidas para evitar situaciones similares en lo sucesivo. El hilo, siempre, se revienta por lo más delgado.
Bueno, María y su pichito están bien. Sin embargo, el comportamiento del vigilante pudo ser fatal porque desconoce los protocolos sobre la vida humana y las pautas ante emergencias médicas. No se trata de un asunto menor.
Autoritarismo, apatía en el manejo de emergencias, ignorancia supina muchas veces nefasta, son una constante de esos sujetos que cuidan los accesos a las clínicas gubernamentales, solapados por los altos mandos.
Emergen de empresas privadas que han creado monopolios implacables. Los carros mortuorios están como buitres carroñeros afuera de los hospitales en un espectáculo que lastima la dignidad humana.
El cambio
4.- El secretario de Protección Civil, Mauricio Cordero Rodríguez, informó que, en estos primeros meses de la administración del gobernador Ramírez se han realizado 679 servicios de traslados médicos.
La atención a través de este tipo de operaciones aéreas ha registrado un incremento importante en comparación con el año pasado, en el que durante el mismo periodo de tiempo se realizaron 267 traslados.
La Dirección de Rescate Aéreo cuenta con tres helicópteros de entre uno y hasta 12 pasajeros dependiendo el tipo de operación, además de una nave Cessna para el tema preventivo de sobrevuelos de incendios; ocho pilotos para helicóptero y tres pilotos de ala fija, un taller de mantenimiento que da atención a todas las aeronaves del Gobierno del Estado con ingenieros, personal técnico de mantenimiento y especialistas en electrónica.
Los lastres
5.- Durante su reciente visita a Palenque, el fin de semana, Ramírez Aguilar dio a conocer que los helicópteros y aviones del Gobierno de Chiapas están al servicio del pueblo para atender emergencias médicas, por lo que el Isstech podrá hacer uso de estas aeronaves cuando sea necesario.
Además, anunció que las y los derechohabientes que utilicen el servicio de Aerobalam para acudir a sus consultas serán beneficiados con la cobertura del costo de los boletos por parte del instituto.
No es fácil desterrar lastres que se enraizaron hasta el tuétano de la estructura gubernamental del pasado, ahí donde manda Mamón, rey de la avaricia en el infierno.
El gobernador Ramírez lleva a cabo una reinvención de procesos con la ley en mano. Son cambios de gran escala porque sólo había de una: sacar a Chiapas del inframundo. Y lo está haciendo bien…
