Los chakras del alcalde
Chuleando Tuxtla
Rugen los bulldozers
Julión Álvarez
1.- No duermas para descansar, duerme para soñar. Porque los sueños están para cumplirse, citó alguna vez ese genio llamado Walt Disney pues dormir -y soñar- es un combustible en la mente y el alma.
Yo no sé cuántas horas duerme el joven alcalde Ángel Torres Culebro, aunque él ha dicho que pocas. Otro estadista, Napoleón Bonaparte, dijo sobre las horas de sueño: “Seis para un hombre, siete para una mujer, ocho para un tonto”.
A diferencia de nosotros los simples terrenales, así nos llama el librepensador Julión Álvarez, ellos, los funcionarios públicos, no pueden darse el lujo de caer rendidos a Morfeo, pues tienen tareas demandantes, de altos niveles de estrés y deben estar con un ojo al gato y otro al garabato para responder si llegase a presentarse cualquier emergencia.
De lo que sí estoy seguro es de que Ángel sueña con una Tuxtla cada vez más moderna, resiliente y sostenible, garantizando bienestar a sus habitantes ahora que la globalización se presenta con retos en lo económico, social, cultural, tecnológico, etc.
Veo a un Ángel que sueña y cumple porque ayer andaba inaugurando calles, supervisando obras, desahogando la agenda con los ciudadanos, hoy recorre colonias pues la nueva política implica tener una conexión profunda en lo físico y emocional con el pueblo. Los chakras del alcalde están perfectamente alineados hacia sus semejantes.
¿Y mañana dónde estará? Eso es de todos los días, todos los días nos sorprende con decirles que ya ni tiempo le da de ir a comprar mole al tradicional barrio de San Roque.
Un bot
2.- Hace poco hice una publicación en mi Facebook sobre la inauguración de una calle en la colonia Las Lajas, rumbo a El Sumidero. Ahí, 30 años atrás venían pidiendo esa calle, alumbrado público y seguridad. Llegó Ángel y les cumplió…
Me pareció importante decirlo porque, insisto, tres décadas los vecinos se toparon con la omisión gubernamental al grado de que estalló una crisis social y, en lugar de armonía, hubo miedo. El crimen echó raíz porque el crimen opera así: busca la complicidad institucional.
Bueno, el chiste es que un bot -esos monstruos que abundan en FB y Twitter como Hidras de Lerna- me reclamó que porqué el muy querido alcalde inauguraba una sola calle, cuando había muchas en mal estado.
Discutir con un necio es perder tiempo y paz, sin embargo, tuve que explicarle que la publicación con sus respectivas fotos era sólo un ejemplo del trabajo integral realizado en Tuxtla, un trabajo homogéneo entre Ángel Torres y el gobernador Ramírez. Aquí se aplica una cirugía mayor después del desastre que otros provocaron.
Un arte
3.- Pasamos de tener alcaldes ladrones como Yassir Vázquez Hernández y el nihilista Francisco Rojas Toledo, sin duda el peor y más asqueroso espécimen del serengueti urbano, a un joven que ejerce liderazgo y maneja la psicología organizacional.
En Linda Vista Shanká, El Roble, Santa Cruz, Belisario Domínguez, Nuevo Amanecer, Reforma, ejidos El Jobo y Copoya, entre otras, los bulldozers rugen ante la alegría colectiva anunciando que pronto habrá nuevas calles.
Ignoro cuántas calles nuevas hay en Tuxtla desde que Ángel inició su gestión, pero son varios cientos. Es un alcalde proactivo que rompió viejos paradigmas y de gobernar hizo un arte, una filosofía.
Chuleando Tuxtla
4.- El Programa Chuleando Tuxtla se ha convertido en una de las acciones más visibles y efectivas del gobierno municipal citadino. Que cada viernes llegue a las colonias no es casualidad: es constancia, cercanía y esfuerzo directo con la gente donde más se necesita.
Tras su arranque en Terán, pasando por Plan de Ayala y La Reliquia, el programa demuestra que atender el rezago urbano sí es posible cuando hay voluntad. Hoy, más de 90 colonias han sido beneficiadas.
Levantamiento de cacharros, escombros y producto verde, además de servicios de salud, Smapa, obras públicas, desarrollo urbano y protección civil, confirman que Chuleando Tuxtla es justo y necesario para mejorar la imagen urbana y la calidad de vida de las y los tuxtlecos.
Julión
En fechas recientes, el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar se reunió con el cantante chiapaneco del regional mexicano Julión Álvarez, a quien entregó un reconocimiento por ser uno de los máximos exponentes de este género en nuestro país.
De igual forma destacó que es un artista muy cercano al pueblo, que ha puesto el nombre de Chiapas en alto, incluso en el plano internacional con canciones que hablan del amor.
Aunque en lo particular no me gusta esa música, lo que es de Julión, a Julión. Diversos desafíos lo pusieron a prueba siendo todavía un chavito y, ya con un carrera consolidada, se enfrentó al gobierno de Estados Unidos para salvaguardar su reputación.
Si las cosas que valen la pena se hicieran fácilmente, cualquiera las haría.
