En 2019, el consumo de alcohol contribuyó con 2.6 millones de muertes (4.7 % del total de muertes) y 115.9 millones de años de vida ajustados por discapacidad (AVAD), señaló el investigador del Instituto Nacional de Psiquiatría “Ramón de la Fuente Muñiz” (INPRFM), Raúl Martín del Campo.

Por lo que es necesario fortalecer la prevención y atender el consumo de alcohol en estudiantes, a través de servicios médicos o psicológicos, dijo durante el foro “Alcohol, violencia y familia”.

Detalló que, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2022 (Ensanut), quienes no estudian, presentan niveles más altos de consumo de bebidas alcohólicas que quienes sí acuden a la escuela.

Además, los estudiantes de nivel superior son quienes más consumen alcohol, en comparación con los de secundaria y preparatoria; y las personas de ingresos altos consumen más alcohol que quienes son de ingreso medio y bajo; esto, debido a las condiciones sociales y de asequibilidad.

Los adolescentes varones tienden a ingerir más bebidas alcohólicas que las mujeres; no obstante, las mujeres tienen más riesgo de dependencia debido a situaciones sociales y biológicas.