Esta semana, el Fondo Monetario Internacional (FMI) dará a conocer la primera actualización de sus perspectivas económicas de 2021.

Analistas coinciden que no serán tan malas noticias, pues la esperanza está centrada en la efectividad de las vacunas y su distribución en la mayor parte de los países.

Hace un año, el FMI veía como riesgos las tensiones geopolíticas y comerciales, y las de índole idiosincrático en economías emergentes. Nadie se imaginaba que un nuevo virus surgido en una ciudad de China se fuera a propagar por el mundo, provocando la crisis sanitaria y económica más devastadora desde la Segunda Guerra Mundial.

Ahora el reto es mayúsculo pese a tener el remedio para que la economía global pueda operar al 100 %, porque no todos los países tienen a la mano la posibilidad de contar con vacunas para su población.

La segunda ola de contagios pondrá a prueba a la mayoría de los gobiernos para acelerar la aplicación de la vacuna, y con ello abrirle la puerta de par en par a la recuperación.

Las últimas proyecciones del FMI de octubre de 2020 traen un avance para la economía mundial de 5.2 %, y para México de 3.5 %, que se espera se mantengan en ese nivel.

El Banco Mundial (BM) dio a conocer a principios de 2021 su pronóstico para la economía global, con cuatro por ciento de crecimiento, que representan una recuperación moderada con daños que reparar.

Para el gigante financiero español BBVA, durante 2021 la economía mundial podría exhibir un crecimiento de 5.3 %.