La Suprema Corte de Estados Unidos bloqueó la orden del presidente Joe Biden de imponer la vacunación o pruebas obligatorias en las grandes empresas, aunque accedió a permitir la vacunación para algunos empleados del sector de la atención médica.

“Aunque el Congreso ha dado indisputablemente a la OSHA (Administración de Seguridad y Salud en el Trabajo) el poder de regular los peligros ocupacionales, no le ha dado el poder de regular la salud pública más ampliamente. Requerir la vacunación de 84 millones de estadounidenses, seleccionados simplemente porque trabajan para patrones con más de 100 empleados”; señaló el Supremo.

Atención médica

En cambio, consideró que el mandato separado de requerir la vacunación para alrededor de 20 millones de empleados del sector de la atención médica puede entrar en vigor.

Los jueces Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan, considerados liberales, discreparon del fallo sobre las empresas.

“Si somos inteligentes, sabremos que no debemos desplazar los juicios de los expertos, que actúan dentro de la esfera que el Congreso marcó y bajo el control presidencial, para hacer frente a las condiciones de emergencia”, escribieron. “Hoy, no estamos siendo inteligentes. Frente a una pandemia que aún está en pleno apogeo, este Tribunal le dice a la agencia encargada de proteger la seguridad de los trabajadores que no puede hacerlo en todos los lugares de trabajo necesarios.