Este año, así como en el último trimestre de 2022, los niveles de pobreza en México se mantendrán presionados por la carestía en alimentos, así como por un bajo crecimiento económico y la escasa generación de empleos formales con ingresos suficientes, dijo Sofía Ramírez, directora general de México ¿Cómo vamos?

Del segundo al tercer trimestre del año pasado, la pobreza laboral —porcentaje de la población cuyo ingreso laboral es insuficiente para cubrir el costo de la canasta alimentaria— repuntó de 38.3 a 40.1 %, sobre todo por el fuerte aumento de precios.

Para medir la pobreza laboral, el Consejo Nacional de Evaluación para la Política de Desarrollo Social (Coneval) toma como referencia esa canasta, cuyo costo alcanzó su máximo incremento anual por arriba de 14 % durante septiembre y octubre de 2022, para terminar el año con tasas de 11.4 % en el ámbito rural y 11.7 % en el urbano.

Tomando en cuenta que durante los últimos tres meses del año la actividad económica se desaceleró y hubo menor generación de empleos, sumado a que la inflación en alimentos siguió elevada.