Personas lamentaron no poder ingresar a la inauguración del evento “México-Tenochtitlan, siete siglos de Legado de Grandeza” en el Zócalo Capitalino, pues es privado y se encuentra bardeado para evitar el acceso.
Desde la mañana de ayer sábado 26 de julio, cientos de personas se congregan en los alrededores del zócalo para alcanzar a ver las mega esculturas prehispánicas, incluyendo la Piedra del Sol, de Coyolxauhqui y Tonantzin Coatlicue. Así como las presentaciones de decenas de danzantes originarios de todo el país.
“Déjenos pasar, ¿para qué hacen eventos privados? El zócalo es del pueblo”, gritó un señor al ser negado el acceso a la plancha del recinto. Otro, reprochó que solo se pudiera ingresar con invitación o “teniendo un nombre importante”.
Durante el discurso de la presidenta Claudia Sheinbaum, donde conmemoró la historia de México, cientos de personas observaban de lejos el mega evento con vallas de acero. Por todos los accesos del zócalo capitalino, personal de seguridad también negó la entrada a danzantes, personal de utilería, maquillistas, estudiantes, fotógrafos y hasta de vecinos de las calles Moneda, 20 de Noviembre y Correo Mayor.