Reino Unido probó un láser de 140 millones de libras (177 millones de dólares), llamado Dragon Fire. El gobierno británico informó que se disparó a un alcance remoto en el campo de tiro de las Hébridas del Ministerio de Defensa; es un arma de línea de visión y puede atacar a cualquier objetivo visible.
De acuerdo con el gobierno, cada lanzamiento costó solo 10 libras. Además encenderlo durante 10 segundos equivale al coste de utilizar un calentador normal durante únicamente una hora.
Por lo tanto, tiene el potencial de ser una alternativa de bajo costo a largo plazo para ciertas tareas que realizan actualmente los misiles.
Se añadió que el diseño es para derribar misiles, aviones, drones e incluso satélites con “precisión milimétrica”; mencionó que está funcionando con cinco años de retraso y su desarrollo ha costado más de 140 millones de libras esterlinas.
De acuerdo con medios, los altos mandos militares esperan que pueda reemplazar misiles multimillonarios como el sistema Sea Viper de la Royal Navy, utilizado contra los drones y cohetes rebeldes hutíes sobre el mar Rojo.