La Presidencia del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) rechazó cualquier manifestación de violencia y reafirmó su convicción por mantener los canales de diálogo y comunicación como vía idónea para solucionar los conflictos.
Esto luego que trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF), entre ellas dos juezas, que protestaban en contra de la reforma judicial, fueron retenidas por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México (CDMX), a las afueras Autódromo Hermanos Rodríguez, violentando su libre derecho, en forma pacífica a la expresión pública.
Jufed llama a respetar el derecho a la libre manifestación
Por su parte, la Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (Jufed) llamó a las autoridades federales a respetar el derecho a la libre manifestación, y adelantó que recurrirá a las instancias internacionales a denunciar el uso de las fuerzas del Estado para impedir la defensa de tales derechos.
Esto luego del encapsulamiento por parte de policías capitalinos de dos juezas y varios trabajadores en las afueras del recinto deportivo donde se llevaba a cabo el Gran Premio (GP) de la Formula 1, a donde acudieron a manifestarse los trabajadores en contra de la reforma judicial.
La Jufed resaltó que utilizar la violencia institucional en contra de dos juezas y personal jurisdiccional que se expresaban pacíficamente en la defensa de los derechos de los integrantes del PJF, afectados por la reforma judicial, refleja el incremento de la intolerancia gubernamental, que contradice los principios democráticos que dice enarbolar.
Enfatizó que las personas juzgadoras y trabajadoras continuarán ejerciendo pacíficamente su derecho a defender la autonomía e independencia del PJF porque en esencia afecta el basamento de la democracia.
En tanto, la Asociación Mexicana de Juzgadoras, Asociación Civil y Asociación Mexicana de Trabajadoras del PJF condenaron la represión y el encapsulamiento.
Calificaron como inaceptable que el Estado, en lugar de proteger a quienes ejercen su derecho a la protesta pacífica, recurre a tácticas de represión, violando la libertad y seguridad de nuestras compañeras y colegas.
Las asociaciones indicaron que esta acción no solo es una violación de derechos humanos, sino una expresión de violencia que busca silenciar a las voces críticas y a quienes defienden un Poder Judicial independiente.
Destacaron que, en un contexto de polarización creciente en el país, exacerbada por la reforma judicial y los discursos de odio emitidos por el oficialismo, el uso de la fuerza pública para reprimir manifestaciones pacíficas es una señal alarmante e inaceptable.
Refirieron que es urgente detener la escalada de violencia y los actos de represión que se observan en varios lugares, como acontecieron esta semana en Michoacán, Chiapas, Puebla y CDMX.
Las asociaciones precisaron que las autoridades tienen la responsabilidad de actuar en favor del bienestar y la protección de los derechos humanos de todas las personas, sin distinción alguna, promoviendo la paz y el diálogo constructivo.