El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó el cese al fuego entre Israel y Hezbolá.
En una breve conferencia de prensa, el mandatario indicó que la idea es que sea permanente, pero que por lo pronto, regirá los próximos 60 días, y permitirá a los civiles poco a poco regresar a sus hogares y reconstruir.
Advierte que no se permitirá a Hezbolá reconstruir su infraestructura militar ni atacar a Israel, y que si viola el cese el fuego, Israel tiene derecho a responder, bajo el concepto de autodefensa.
Biden afirma que el objetivo de terminar el fuego es “poner fin al devastador conflicto entre Israel y Líbano”.
Biden llama a la organización islamista Hamas a sopesar sus opciones y asegura que el único camino para la paz y poner fin al sufrimiento de los palestinos es que entreguen a los rehenes que tienen en su poder.
El acuerdo entre Israel y Hezbolá, afirma, indica que “la paz es posible”.
Además, dijo que el alto el fuego, ya avalado por el gabinete de Seguridad de Israel, entra en vigor a las 4:00 am (hora local) del miércoles.
El presidente norteamericano señaló que la población de Gaza también “merece el fin de los combates y los desplazamientos”, ya que los ataques israelíes continúan sobre ese asediado territorio, y aseguró que su gobierno seguirá trabajando con los países mediadores para lograr un alto el fuego.
“Los habitantes de Gaza también merecen que se ponga fin a los combates y a los desplazamientos. Han vivido un infierno”, declaró.