La Corte Suprema de Estados Unidos se negó el miércoles a detener la ejecución de un condenado a muerte de Alabama, la cual está prevista para esta semana mediante gas nitrógeno, un método totalmente nuevo que algunos expertos han tachado de secreto por temor a que pueda provocar dolor excesivo o incluso que constituya tortura.

Kenneth Smith, condenado a muerte por asesinar a Elizabeth Sennett en 1988, se opone a ser ejecutado por hipoxia nitrogenada, alegando que eso viola su derecho a no ser sometido a castigos crueles e inusuales en virtud de la Octava Enmienda de la Constitución.

Smith tiene otra demanda pendiente ante un tribunal federal que podría dar lugar a la suspensión de la ejecución, programada para este jueves en la prisión Holman de Atmore, Alabama.

Alabama es uno de los tres estados de Estados Unidos que aprobó el método de hipoxia de nitrógeno, que consiste en suministrar ese gas a través de una mascarilla hasta privar al cuerpo de oxígeno.