La gobernadora de Morelos, Margarita González Saravia, rechazó que la remoción del fiscal Uriel Carmona Gándara, haya sido un acto para defender al exgobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo, sobre quien pesa una solicitud de desafuero por el delito de violación en grado de tentativa, en agravio de su media hermana.

El jueves, el exfiscal Uriel Carmona declaró a la prensa que paradójicamente, cuando pidió suprimir el fuero al exgobernador para ser procesado, la administración estatal ejecutó su destitución, y con ello, sugirió que habría protección para Blanco Bravo.

“Es completamente falso. El fiscal se sintió atrapado cuando supo que nosotros íbamos a tener mayoría en el Congreso. Y eso fue un salvavidas que trató de usar él, una forma de presionar, porque esta denuncia la tenía desde el 2023. Su obligación era haber hecho esa denuncia desde entonces y siempre la usó como una forma de chantaje”, sostuvo.

Y sobre la acusación que enfrenta el actual diputado federal, la gobernadora aseguró que siempre estará del lado de la justicia hacia las mujeres. “Yo no voy a proteger a nadie ni mucho menos. Es una tarea de la Fiscalía y cuando la justicia siga su curso nosotros vamos a respaldar”, afirmó.