Dinero del narco fluye en comicios de América Latina
Ya sea en comicios regionales o nacionales, el riesgo de incursión de dinero sucio está latente en AL y el Caribe. Cortesía

Los costarricenses observaron en enero pasado un despliegue de recursos millonarios que remató el 4 de febrero en unos comicios para elegir alcaldes, regidores y otras autoridades de los 84 municipios de Costa Rica.

En una práctica que se prolongó por América Latina y el Caribe, las elecciones municipales de la zona se convirtieron en un foco preferido por el crimen organizado para infiltrarse y ganar poder político, aunque los nacionales también, como medio para inyectar recursos ilícitos y garantizarse impunidad, favores y privilegios en sus operativos criminales. Parte de la infiltración fue con “donaciones” de los más poderosos cárteles mexicanos: De Sinaloa y Jalisco Nueva Generación (CJNG).

“América Latina es vulnerable en sus sistemas electorales, algunos muy frágiles y controlados por los grupos de poder y los gobiernos”, afirmó el abogado, economista e historiador político costarricense Álvaro Ramos, analista político y de seguridad. “La larga noche [de los siglos XX y XXI] de dictaduras militares de derecha, izquierda y regímenes populistas creó un ambiente poco propicio para tener instituciones de una democracia moderna occidental con partidos políticos fuertes y finanzas legales”, dijo Ramos.

“En América Latina priva el financiamiento del Estado [a los partidos], botín económico de los políticos para mucha corrupción”, añadió. Tras subrayar que “a los grandes narcotraficantes de Colombia les interesó que los políticos se opusieran a la extradición [de criminales] a Estados Unidos” en la década de 1980, recordó que “en México constantemente afloran relaciones de partidos y campañas electorales [con el narcotráfico]”.

Elecciones

El calendario electoral de 2024 en América Latina y el Caribe ya avanzó. El Salvador tuvo presidenciales en febrero; Panamá y República Dominicana lo harán en mayo; México, en junio; Uruguay, en octubre, y Venezuela, en el segundo semestre. Además de Brasil, que tendrá municipales en octubre.

La casta del “narcoalcalde” proliferó en Guatemala. Por ejemplo, la alcaldesa guatemalteca electa en junio de 2023 de Ayutla, en el suroccidental departamento (estado) de San Marcos, limítrofe con Chiapas, México, Isel Suñiga, asumió en enero y la semana anterior fue designada narcotraficante por EE. UU. y aliada del Cártel de Sinaloa. Los comicios de 2023 en el país centroamericano posicionaron en San Marcos a tres alcaldes sospechosos de narcotráfico.

La penetración mexicana en Honduras quedó exhibida este mes en un juicio por narcotráfico en EE. UU. contra el ex presidente derechista Juan Orlando Hernández (2014-2022), por recibir dinero del Cártel de Sinaloa, entre otros hechos.

Por el asedio de los Cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, y luego de que Ecuador declaró el 9 de enero de este año un “conflicto armado interno” para atacar al crimen organizado y al narcotráfico en particular, Estados Unidos reforzó los planes municipales ecuatorianos de seguridad.

Influencias

Ya sea en comicios regionales o nacionales, el riesgo de incursión de dinero sucio está latente en América Latina y el Caribe, quizás con una excepción: Cuba, por su régimen totalitario comunista y sin multipartidismo. En contraste, Venezuela, que proclamó ser socialista, evidenció la incesante influencia del Cártel de los Soles, mafia del narcotráfico y de otras redes del crimen organizado controlada por militares y políticos venezolanos. Colombia fue estremecida en 1994 por la denuncia de que el centroizquierdista Ernesto Samper ganó los comicios presidenciales de ese año con gastos pagados —en parte— por el ya desaparecido Cártel de Cali. El caso fue archivado por el Congreso en 1996, pero la gestión de Samper, de 1994 a 1998, quedó marcada por ese proceso. En la actual administración del presidente Gustavo Petro, su hijo reconoció que entró a la campaña de su padre dinero del narcotráfico.

En Perú, describió el coronel peruano en retiro Juan Roberto Paz, ex secretario general de la Policía Nacional, “en las [elecciones] congresales, regionales y municipales ha sido más notoria la participación del narcotráfico en su financiamiento, pero no de cárteles, sino de clanes familiares aliados de una facción del grupo terrorista Sendero Luminoso”.