Las autoridades estadounidenses informaron este lunes de que hubo tres llamadas de asistencia del buque escuela mexicano Cuauhtémoc, tan solo cuatro minutos después de que zarpara el sábado en Nueva York, antes de colisionar con el puente de Brooklyn, pero de momento se niegan a "especular" sobre las causas del accidente.
Así lo declaró Michael Graham, miembro de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB), la principal autoridad de Estados Unidos encargada de la investigación, en una rueda de prensa donde ofreció algunos detalles sobre el incidente antes de que su organismo redacte un informe preliminar, previsto en 30 días.
La NTSB ha formado un grupo multidisciplinar de investigadores que empezó a llegar el domingo por la tarde, con expertos en operaciones náuticas, ingeniería marina y de puentes, y supervivencia, explicó.
Agregó que la velocidad de la corriente del East River hacia el puente de Brooklyn era de tres nudos, pero tras zarpar el navío haciendo marcha atrás, esa velocidad se incrementó a seis nudos.