El presidente francés, Emmanuel Macron, y el próximo mandatario estadounidense, Donald Trump, protagonizaron la tarde del sábado un más que efusivo apretón de manos ante las cámaras de prensa; para luego reunirse con el ucraniano Volodímir Zelenski en el Palacio del Elíseo.
La visita a París es el primer viaje internacional que realiza Trump desde las elecciones presidenciales en noviembre. “Parece que el mundo se está volviendo un poco loco en estos momentos y hablaremos de eso”, indicó antes de la reunión.
En la escena frente a la sede presidencial francesa, luego de descender de su automóvil, Trump estrechó la mano de Macron y comenzó un largo tironeo en el que el estadounidense parecía menos apurado que el francés en soltar sus diestras.
Una escena casi similar se repitió segundos después cuando Trump volvió a saludar al presidente francés, al ingresar al palacio.
Antes de su reunión, Macron, Trump y Zelensky posaron para una foto ante la prensa, sin hacer comentarios.
Las conversaciones que duraron unos 35 minutos tuvieron lugar previo la reinauguración de la catedral de Notre Dame.
Los convoyes de Trump y Zelensky se dirigieron, uno tras otro, hacia la catedral de Notre-Dame, para asistir a la ceremonia de reapertura del edificio histórico, cinco años después del devastador incendio que sufrió.
El encuentro se “decidió un poco a último momento”, indicó una fuente diplomática francesa.
La reunión fue clave para Zelensky, que apenas había mantenido una breve conversación telefónica con Trump desde su elección a principios de noviembre.
El presidente electo de Estados Unidos afirmó en repetidas ocasiones que pretendía distanciarse de la política de apoyo a Kiev, liderada por el actual mandatario, Joe Biden. Ucrania fue invadida por Rusia en febrero de 2022.
Trump, que criticó los miles de millones de dólares de la ayuda enviada a Ucrania, prometió durante la campaña electoral arreglar el conflicto “en 24 horas”, sin precisar de qué manera lo haría.