Juan José Farías fue junto con Hipólito Mora y Ángel Gutiérrez, uno de los tres principales fundadores de los grupos de autodefensas en Michoacán que se levantaron en armas para combatir al cártel de “Los Caballeros Templarios” en 2013.

Informes de inteligencia ubicaban desde el año 2004 a Farías Álvarez como lugarteniente del cártel de “Los Valencia” que, en el año 2005 inició una guerra contra la Familia Michoacana (LFM) y “Los Zetas” por el control del territorio.

A Juan José Farías las autoridades estatales y federales le achacaron la ola de homicidios que se registraron en esta disputa, entre bandas criminales, tras la escisión de Armando Valencia y Carlos Rosales “El Tísico”.

Juan José Farías formó parte como lugarteniente de la estructura del también conocido “cártel del Milenio”, que desde 1990 quedó bajo el mando de Armando Valencia, quién primero se enfrascó en una lucha armada con “Los Zetas” y después con “La Familia”.

En 2009 “El Abuelo” fue detenido por el Ejército en el municipio de Buenavista, durante una acción antidrogas implementada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), ordenada por el entonces presidente Felipe Calderón.

Farías Álvarez fue detenido en posesión de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército y droga (hachís), por lo que fue sentenciado a poco más de tres años de prisión, lo que le permitió salir bajo fianza poco tiempo después de su captura.

Durante casi tres años nada se supo de Juan José Farías, hasta que levantó en armas a su tierra, Tepalcatepec, y se relacionó directamente, poco tiempo después, con el entonces comisionado federal Alfredo Castillo Cervantes.

El 10 de mayo del 2014 –un año después del levantamiento en armas- Castillo Cervantes incluso armó “legalmente” a “El Abuelo”, su interlocutor y operador ante el Consejo General de Autodefensas y Guardias Comunitarias, a quienes adiestró.