El mundo despide a la reina Isabel II

Luego de darse a conocer la noticia del deceso de la reina Isabel II a los 96 años de edad, miembros de la política y el espectáculo que llegaron a conocerla han pronunciado sus condolencias.

Liz Truss, primera ministra de Reino Unido

“Todos estamos devastados por las noticias que acabamos de escuchar de Balmoral. La muerte de su majestad la reina es un gran impacto para la nación y el mundo”, afirmó la primera ministra afuera de su residencia en Downing Street.

ONU

La Organización de las Naciones Unidas mediante su secretario general, Antonio Guterres, se unieron al duelo, además en un comunicado se refirió a la reina “como la jefa de Estado más longeva y reinante del Reino Unido”, destacando que fue admirada en todo el mundo por su dignidad y dedicación.

La Casa Blanca

Mediante la portavoz Karine Jean-Pierre, la Casa Blanca expresó: “Llevamos en nuestros corazones y tenemos presente en el pensamiento a los familiares de la reina y al pueblo del Reino Unido”.

Además el cantante Elton John, quien fue nombrado como caballero de la corona en 1998 (título máximo que otorga la Excelentísima Orden del Imperio Británico), compartió su tristeza y le dedicó unas palabras en su cuenta oficial de Instagram.

Andrés Manuel López Obrador, presidente de México

El presidente de México recurrió a Twitter para mostrar su empatía. De la misma forma, Marcelo Ebrad, secretario de Relaciones Exteriores de México, dedicó un breve mensaje mediante Twitter para expresar sus condolencias al Reino Unido.

“Lamentable, el fallecimiento de la reina Isabel II, jefa de Estado del Reino Unido. Nuestras condolencias al pueblo británico. Sin duda, deja un legado histórico”, escribió el presidente del Senado, Ricardo Monreal.

Famosos en contra de la corona

Así como siempre hubo famosos que la apoyaron, también están los que estuvieron en contra de la corona y lo manifestaron de forma abierta.

Uno de los que siempre criticó a la monarquía es el presentador de MTV, Russell Brand, quien en muchas ocasiones confrontó a los que consideraba “conservadores” de su país, una ocasión señaló que detestaba referirse como su majestad o su alteza para dirigirse a ella, pues para el exesposo de Katy Perry era “solo una persona”.

Isabel II es considerada por los británicos como “la Reina Eterna”. Llegó al trono de Inglaterra por una carambola del destino, pero aprendió rápidamente las tareas propias de su cargo y convirtió el respeto a los protocolos y la protección a ultranza de la corona británica las principales características de su reinado, el más longevo del mundo.

La reina era considerada hasta hace unos años como una mujer de hierro, a la que nada, ni los mas graves escándalos de la corona, ni los problemas británicos, podían vencer. Pero su salud fue mermando en los últimos años y se le veía en ocasiones molesta por sus problemas de movilidad.

Camila: nunca reina, solo princesa

Como sucesor de la Corona británica, Carlos III será coronado en los próximos días después de un tiempo considerable de luto por el fallecimiento de su madre; sin embargo, su esposa Camila no recibirá el título de reina de Inglaterra.

Si bien el 10 mayo Isabel II cedió el puesto por primera vez a su hijo Carlos, en el llamado Discurso de la Reina en el Parlamento, él recibió el título de príncipe de Gales en 1958, por lo que sus esposas serían nombradas de igual forma y no reinas.

Es así que ninguna de las esposas de Carlos III será nombrada reina de Inglaterra, ya que el título está reservado sólo a aquellos con descendencia real.

Cambio de títulos

Con la noticia del sensible fallecimiento de la reina Isabel II, de forma automática su hijo mayor, Carlos de Gales, asumió el trono como rey, por lo que ahora su hijo William, duque de Cambridge y su esposa Kate Middleton se han convertido en duques de Cornualles.

Por consiguiente ahora a los hijos que tuvo dicho matrimonio se les debe referir con los títulos de príncipe George de Cornwall y Cambridge; princesa Charlotte de Cornwall y Cambridge; príncipe Louis de Cornwall y Cambridge.