La Fiscalía de Jalisco indaga si hubo alguna omisión durante la revisión que se hizo en septiembre y octubre de 2024 al Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, donde el pasado 5 de marzo el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco localizó tres hornos crematorios clandestinos y reveló que el sitio, de casi 10 hectáreas, era utilizado por el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) como centro de confinamiento, adiestramiento y exterminio.
A través de un comunicado, la dependencia indicó que el fiscal del Estado, Salvador González de los Santos, supervisa directamente las indagatorias y adelantó que a partir de esta semana se brindará información de manera pública para que las familias y las personas interesadas puedan consultarla a través de los canales institucionales; además, señaló que se cuenta con registros fotográficos de cada una de las 400 prendas localizadas en el inmueble.
La Fiscalía recordó que, en septiembre de 2024, tras un enfrentamiento entre elementos de la Guardia Nacional y sujetos armados, se detuvo en ese sitio a 10 personas, se liberaron a dos más y se localizó a una persona sin vida.
Durante el tiroteo, “un número indeterminado de personas huyó del sitio para evitar ser detenida”, precisó la dependencia, por lo que advirtió que la existencia de artículos personales en el sitio no necesariamente significa que quienes las utilizaban estén sin vida.