Vecinos y autoridades del municipio de Metztitlán, Hidalgo, se mantienen en alerta ya que desde hace una semana comenzó a secarse la laguna de Metztitlán, a causa del estiaje, por lo que al momento el afluente se ha reducido en un 95 por ciento y se prevén repercusiones para el campo, ya que esa zona es considerada el granero del estado.

Gregorio Badillo, encargado del Área de Ecología del Ayuntamiento de Meztitlán, señaló que la alarma se prendió entre el miércoles y jueves de la semana pasada, en que los vecinos reportaron que comenzaba a disminuir el nivel del agua en el afluente, el cual tiene alrededor de 581 hectáreas.

Precisó que la falta de lluvias desde el año pasado y en lo que va del 2020, repercutió severamente en el embalse, además de que con ello se perdieron todos los peces de cultivo que se tenían.