El Gobierno de México rechazó categóricamente la decisión del Departamento de Comercio de Estados Unidos, de abandonar el Acuerdo de Suspensión de la Investigación Antidumping sobre el jitomate fresco mexicano e imponer una cuota compensatoria del 17.09 % a sus exportaciones.
A través de un comunicado conjunto, las secretarías de Economía y Agricultura calificaron como “injusta” la medida anunciada este lunes, al señalar que perjudica tanto a los productores mexicanos como a la cadena agroalimentaria estadounidense.
“La posición que ha ganado el tomate fresco mexicano en el mercado de Estados Unidos es resultado de su calidad, no de prácticas desleales”, advirtieron las dependencias, tras asegurar que las propuestas hechas por los tomateros nacionales durante 90 días de negociación fueron ignoradas por “razones políticas”.
La medida revive un diferendo comercial de casi tres décadas. Desde 1996, productores estadounidenses han alegado que México incurre en dumping -la venta por debajo del precio justo de mercado-, aunque el procedimiento ha sido suspendido en cinco ocasiones. La última negociación culminó en 2019 con un acuerdo restaurado cuatro meses.