Migrantes viven con incertidumbre
En la última semana de 2024 se ha visto un aumento de la presencia de migrantes en las calles de Juárez. Cortesía

Muchos de los migrantes que están llegando a Ciudad Juárez en espera de poder cruzar a Estados Unidos lo están haciendo de madrugada y tratando de burlar el operativo de la Guardia Nacional de Texas instalado a lo largo del muro, para poder solicitar el asilo político a la Patrulla Fronteriza.

Algunos indocumentados comentaron que han intentado cruzar dos y hasta cinco ocasiones en los últimos días, pero en todas han sido retornados a Juárez.

Los extranjeros en tránsito pasan frío y hambre, y durante la madrugada —comentan— es cuando buscan cruzar el río Bravo para lograr entregarse a la Patrulla Fronteriza, pero su intento es fallido porque, aunque pasan los retornan.

En la última semana de 2024 se ha visto un aumento de la presencia de migrantes en las calles de Juárez, quienes durante el día trabajan y esperan la noche para buscar esquivar el cerco de seguridad de las autoridades estadounidenses.

“El deseo para 2025 es amanecer allá, en Estados Unidos, porque aquí en Juárez tenemos hasta el 31 de diciembre para pasar, del 1 de enero en adelante no sabemos lo que nos depara como migrantes”, comentó un venezolano quien tiene menos de una semana en Ciudad Juárez y busca poder cruzar a territorio estadounidense.

Junto con él, otro grupo de migrantes de la misma nacionalidad esperan en la zona centro de la frontera con El Paso, Texas, poder cruzar a esa ciudad antes del 1 de enero de 2025, ya que, a decir de ellos, después de esa fecha sólo hay miedo e incertidumbre sobre lo que pasará con relación a su situación migratoria y con la llegada a la Presidencia de Donald Trump.

En entrevista con El Universal, contaron que llegaron el 23 de diciembre a Ciudad Juárez en el tren, pese a que tuvieron problemas con el Instituto Nacional de Migración (INM), que en varias ocasiones los regresaron a Tapachula, pero volvieron a intentarlo hasta lograr llegar a esta ciudad fronteriza.

Actualmente muchas personas en movilidad viven en las calles del centro de Juárez, donde comen lo que los ciudadanos les regalan o acuden a comedores comunitarios a solicitar ayuda. Otros limpian vidrios o realizan trabajos de un día para poderse sostener, mientras que, para dormir, algunos han tenido que hacerlo en la calle o en refugios temporales.