Una jueza federal ordenó a las autoridades del penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México, brindar atención médica inmediata y necesaria para preservar la salud de Pablo Edwin Huerta Nuño, alias “el flaquito”, presunto operador del Cártel de los Arellano Félix en Tijuana, detenido el mes pasado por fuerzas federales.
Huerta Nuño se quejó ante la titular del Juzgado Tercero de Distrito en Materia Penal en el Estado de México, con residencia en Toluca, Mariana Vieyra Valdés, de que no ha recibido la atención en la especialidad de traumatología en el Centro Federal de Readaptación (Cefereso) Número 1 (Altiplano), donde se encuentra recluido.
En consecuencia, la jueza Vieyra Valdés concedió una suspensión de plano en el amparo que tramitó “el flaquito”, para el efecto de que se le suministren medicamentos y se le practiquen análisis clínicos, necesarios para los padecimientos de los que se queja y conforme a su expediente clínico que obre en la institución de salud o resultado de los estudios que se hayan realizado o se vayan a realizar.
“A fin de salvaguardar los derechos fundamentales de la persona quejosa, con fundamento en los artículos 15, 125 y 126 de la Ley de Amparo, se concede la suspensión de plano, para el efecto de que inmediatamente se otorgue a la persona quejosa ..., para la atención médica necesaria, determinación que obedece a que dicha omisión (de no proporcionar atención médica) pone en peligro la vida, salud e integridad física de la persona quejosa, lo que obliga a la suscrita a intervenir de forma inmediata para la preservación de su salud”, determinó la juzgadora de amparo.