Son “imparables, resistentes, ágiles” y capaces de resistir altas temperaturas. Son perros, pero no serán el mejor amigo de las personas, excepto que se trate de los agentes de la Dirección de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP).
Se trata de los vehículos terrestres no tripulados cuadrúpedos, o Q-UGV; en otras palabras, los robot-perro, un proyecto que pronto podría sumarse “a los esfuerzos de seguridad en la frontera”, según declaró un portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), al cual pertenece la Dirección de Aduanas y Protección Fronteriza, después de las pruebas robóticas en Lorton, Virginia y El Paso, Texas, del 19 de febrero.
Sin embargo, la noticia no ha caído bien entre activistas defensores de los migrantes.
“Cuando supimos de esta especie de programa piloto que hicieron en la frontera —entre Estados Unidos y México— los agentes de la Patrulla Fronteriza (CBP), pensamos que se trataba de algo realmente escandaloso e inhumano”, dijo Luis González, líder comunitario en El Paso.
El portavoz del DHS aclaró que el proyecto “aún está en etapa de investigación para su mejor desarrollo”. No existe, de hecho, una fecha probable para que estos “canes” metálicos entren en acción contra los migrantes que cruzan de manera clandestina.
La empresa que los diseño y los fabricó, Ghost Robotics, que tiene su centro operativo en Philadelphia, tampoco pudo dar a conocer alguna fecha para la entrada en acción de sus “perros” robóticos, pero aseguró que no hay razón para temerles, pues las máquinas cuadrúpedas no están diseñadas para atacar, sino solo para vigilar y rastrear.
Puede “caminar” entre agua y hasta sumergirse si fuera necesario. Cada uno pesa 100 libras (45 kilogramos) y su precio final estará fluctuando entre los 50 mil y los 100 mil dólares por robot.
El precio de venta lo va a determinar el tipo de cámara que se le monte; además de la cámara de video normal, puede agregarse visión nocturna y un sensor de movimiento.
“Son imparables, con la capacidad de volver a levantarse tras cualquier resbalón, caída o fallo y seguir avanzando mediante nuestras operaciones patentadas en modo ciego”, afirma la compañía.