El expresidente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, pidió al Tribunal Electoral, por segunda ocasión, que resuelva el juicio promovido contra su expulsión del PRI, avalada por la Comisión de Justicia.
Ochoa Reza interpuso un segundo incidente de excitativa de justicia, argumentando que han demorado seis meses en resolver su caso.
En el documento dirigido a la magistrada presidenta, Mónica Soto, el expresidente del PRI subrayó que esta demora afecta sus derechos de acceso a una justicia pronta y expedita, y de participación política democrática.
Ochoa Reza afirmó que el caso no reviste de complejidad jurídica que justifique la demora de casi seis meses en su resolución, ya que la demanda se presentó el 11 de diciembre de 2024.
El magistrado Felipe Fuentes no ha dado ninguna actividad procesal, afectando su derecho a una justicia pronta y expedita, y su participación política democrática.
"¿Qué espera? ¿Qué oculta?", cuestiona el exdirigente del PRI, quien asegura que el asunto carece de complejidad jurídica, y que las pruebas —incluyendo notas de prensa, publicaciones en redes sociales y entrevistas— pueden ser revisadas en minutos.
Recordó que el asunto se listó públicamente para su resolución el 31 de enero de 2025. Una semana después llegó un oficio del PRI con pruebas supervinientes, por lo que se retiró del orden del día y el asunto no ha sido presentado desde entonces.
El expresidente del PRI pidió al magistrado Felipe Fuentes, quien es ponente del proyecto, a que actúe de forma imparcial, y que el Tribunal Electoral resuelva conforme a derecho a fin de no permitir una expulsión contraria a los estatutos del partido y a la Constitución de la República.
Por ello, solicita al Tribunal Electoral que se determine procedente la excitativa de justicia y se ordene emitir la sentencia en este juicio.