Piden orar por la paz y la justicia

Piden orar por la paz y la justicia

La Iglesia católica pidió rezar por la paz y la justicia en nuestro país, al afirmar que la oración se convierte en un acto de resistencia y esperanza. “Rezar por la paz no es un gesto pasivo ni ingenuo: es confiar en que Dios actúa en la historia y que, al mismo tiempo, transforma nuestro corazón para que seamos artesanos de reconciliación”.

A través de una editorial publicada en el sitio Desde la Fe, afirmó que la oración es el latido más profundo del corazón humano que busca a Dios. Ya que no es una repetición vacía ni una fórmula mágica, sino un encuentro real con el Creador que transforma el interior de quien se abre a su presencia.

Agregó que “cuando oramos, dejamos que la voz de Dios ilumine nuestras sombras, que su paz serene nuestras inquietudes y que su amor sane nuestras heridas. La oración nos ofrece una mirada nueva: más compasiva, más paciente, más fraterna”.

Orar por la paz

Indicó que la violencia no comienza con las armas: empieza en las palabras ásperas, en los juicios que condenan, en la intolerancia que levanta muros en lugar de tender puentes. La paz, en cambio, “nace cuando se decide cuidar lo que decimos, cuando evitamos sembrar odio en las conversaciones, cuando aprendemos a callar antes de herir”.

Si se quiere un mundo distinto, mencionó la Iglesia, se debe empezar por los hogares. La primera escuela de paz es la familia: allí aprendemos a escuchar, a pedir perdón, a compartir, a respetar las diferencias. Un hogar donde se ora y se dialoga es un espacio que desactiva la violencia y que siembra esperanza.

“La paz no es una utopía espiritual: es un camino humilde, hecho de gestos cotidianos, que entrelaza paciencia y coraje, escucha y acción. Y que requiere nuestra presencia vigilante y generosa”, señaló el papa León XIV.

Subrayó que ese es el camino que puede hacer la diferencia: orar cada día para que el Señor conceda un corazón pacificado, y vivir cada jornada como ocasión para sembrar reconciliación. La oración recuerda que la paz no es solo ausencia de guerra, sino plenitud de vida, fraternidad y justicia.