La pobreza, la violencia y el déficit en la creación de empleos son los principales factores que impulsan a miles de hondureños a salir de su país en busca de nuevas oportunidades de sobrevivencia, que tan sólo en 2018 llevó a más de 722 mil personas a emigrar, en especial hacia Estados Unidos.

Honduras, uno de los países receptores de refugiados más importantes de Centroamérica en la década de los años 80 por los conflictos bélicos en Nicaragua y El Salvador, ahora se convirtió en una nación en la que la migración masiva indocumentada se incrementó en las últimas décadas como consecuencia de su crisis económica.