Política de contención es inhumana: Mujica
En el territorio oaxaqueño, más de mil 500 personas se entregaron voluntariamente a INM. Cortesía

Mermada, cansada y enferma llegó a Acayucan, Veracruz, la caravana de migrantes que partió el 23 de octubre de Tapachula, Chiapas, negándose aceptar durante 29 días las visas humanitarias que el Gobierno Federal ofreció a través del Instituto Nacional de Migración (INM).

Para Irineo Mujica, coordinador de la caravana, durante casi un mes el gobierno de la Cuarta Transformación apostó por una política inhumana que tenía el objetivo de “matar a los migrantes de cansancio” al impedirles transportarse en tractocamiones y obligarlos a caminar 627 kilómetros desde la frontera chiapaneca hasta el sur de Veracruz.

A pesar de ello, se logró el objetivo de la primera etapa, llegar a Acayucan, Veracruz, en donde descansarán por cuatro días y se reorganizarán para avanzar en la siguiente etapa que tiene como fin la Ciudad de México, donde se manifestarán contra la política migratoria.

Sobre las acciones de contención que emprende el Gobierno Federal, como la detención de 400 migrantes en Coatzacoalcos, Veracruz, o mantenerlos por meses en ciudades como Tapachula, Chiapas, con la promesa de la regularización de su situación migratoria, es inhumano, el activista señala: “El diagnóstico que tenemos después de un mes de caminar es que el gobierno le apuesta a una política de contención brutal, tratando de detener a la caravana ofreciendo tarjetas falsas que no tienen validez, pero no ataca las causas. Busca frenar al migrante obligándolo a caminar hasta matarlos de cansancio, pero no lo ha logrado porque el problema se mantiene y vienen más caravanas. A nosotros no nos va a detener, vamos a seguir”.

Irineo Mujica informó que mientras la caravana descansa en Acayucan, él y otros migrantes se trasladarán a Coatzacoalcos para organizar a los migrantes dispersos en la zona y trasladarlos hasta Acayucan. Así, reforzarán el primer contingente, para luego seguir avanzando.

El defensor de derechos humanos descartó esperar la segunda caravana que salió de Tapachula el pasado 17 de noviembre, pues tendrían que esperar más de una semana y es demasiado tiempo.