Aguascalientes, Baja California Sur, Campeche, Colima, Nayarit y Tlaxcala, los seis estados con menor población del país, registran desde el último lustro una tendencia al alza en diversos delitos del fuero común.

Según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), Aguascalientes, no ha podido frenar la violación, que se disparó 32% en lo que va de 2021, comparado con el primer año del sexenio del panista Martín Orozco.

Tras la ola de violencia que azota a su vecino Zacatecas, Orozco solicitó al gobierno federal no descuidar a la entidad.

Baja California Sur, gobernado por el morenista Víctor Manuel Castro Cosío, presenta un aumento de 20% en el delito de violación.

La entidad, con 798 mil habitantes, es tercera a nivel nacional, con una tasa de 27.58 casos de violación por cada 100 mil habitantes, por abajo de Chihuahua y Quintana Roo.

Con 928 mil habitantes, en Campeche, donde recién asumió la gubernatura Layda Sansores, de Morena, tras romper la hegemonía del PRI, las víctimas de homicidio doloso se dispararon 24% en los últimos cincos años.

En tanto, Colima ocupa el cuarto lugar con la tasa más alta de víctimas mujeres de homicidio doloso por cada 100 mil habitantes; además, tiene un incremento de 42% en el delito de violación.

En Tlaxcala, gobernado actualmente por Lorena Cuéllar, de Morena, las víctimas de asesinato se elevaron 54%, es decir, 122 en 2017 y 188 en los primeros 10 meses de 2021, mientras que la extorsión se duplicó de 8 a 16 reportes por ese delito.