La fiscal general del estado de Veracruz, Verónica Hernández Giadans –quien fue designada en el cargo durante el gobierno del morenista Cuitláhuac García Jiménez– presentó su renuncia al cargo ante el Congreso del Estado.
Durante sesión ordinaria de la Legislatura, los diputados recibieron el oficio de la fiscal y aprobaron, por obvia resolución, su renuncia tras seis años en el cargo de los nueve por los que había sido designada.
Hernández Giadans había venido enfrentando fuertes presiones políticas debido a que se le vincula con el exsecretario de Gobierno, Eric Cisneros Burgos, el cual fue gente cercana a la actual gobernadora morenista, Rocío Nahle García; sin embargo, la relación se fracturó cuando el funcionario estatal intentó, sin éxito, disputarle la candidatura de Morena a la gubernatura en el 2024.
La ahora exfiscal había llegado a la FGE en medio de una confrontación para destituir al entonces fiscal Jorge Winckler Ortiz, designado durante el bienio del gobierno del entonces panista Miguel Ángel Yunes Linares.
Fue el 3 de septiembre del 2019 cuando la diputación permanente del Congreso de Veracruz determinó separar provisionalmente de sus funciones al fiscal general del Estado, Jorge Winckler Ortiz.
De manera sorpresiva, se presentó un punto de acuerdo para que fuera separado del cargo; en su lugar, los diputados locales avalaron dejar como encargada de despacho a Verónica Hernández Giadáns.
Tras la decisión del Congreso, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública tomaron en esa ocasión las oficinas centrales de la Fiscalía General e impidieron el acceso a cualquier persona; salvo a la encargada de despacho que ingresó con ayuda de los policías.
Para el 28 de mayo del 2020, los diputados locales eligieron a la Hernández Giadáns como titular de la Fiscalía General del Estado de Veracruz por un periodo de nueve años, los cuales no se cumplieron al renunciar ayer al cargo.











