Rusia y Ucrania acordaron este lunes en Estambul, donde participaron en negociaciones directas, intercambiar todos sus prisioneros de guerra gravemente heridos o menores de 25 años y 6 mil cadáveres de soldados de cada bando, indicó el jefe negociador ucraniano.
“Acordamos intercambiar todos los prisioneros de guerra gravemente heridos y gravemente enfermos. La segunda categoría es la de soldados jóvenes de 18 a 25 años, en el formato todos por todos”, indicó el ministro ucraniano de Defensa, Rustem Umerov. “También acordamos devolver 6 mil (...) cuerpos de soldados caídos en combate [por otros] 6 mil”, añadió.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, insistió en la necesidad de sanciones adicionales más duras contra las exportaciones energéticas rusas y en particular contra la venta de crudo por parte de Moscú si estos nuevos contactos en Turquía mediados por el Gobierno de Ankara, no producen avances hacia un final negociado de la guerra.
“Necesitamos trabajar en sanciones conjuntas a nivel del (club de países industrializados) G7”, dijo Zelensky, que mencionó de forma explícita la importancia de que EE. UU. (que desde la llegada a la Casa Blanca del presidente Donald Trump no ha aprobado nuevas medidas punitivas contra Rusia) esté entre quienes sancionen al Kremlin.
Durante su intervención, Zelensky adelantó sin dar detalles que los países de la OTAN representados en la reunión se han comprometido a enviar nuevos paquetes de ayuda militar y a seguir financiando la producción de armamento en Ucrania.