En un round de sombra de lo que ocurrirá la próxima semana cuando debatan la reforma judicial, el Senado de la República inició su sesión ordinaria de este jueves en la sede alterna de la Vieja Casona de Xicoténcatl.
Con la presencia de 120 de los 128 senadores iniciaron los trabajos legislativos donde se prevé se analicen temas que no tienen relación con la reforma judicial.
Como en excursión escolar luego de una escala en hotel de avenida Revolución, los morenistas y sus aliados arribaron en tres autobuses encabezados por su coordinador Adán Augusto López.
Solo se prevén la solicitud de dos licencias de senadores, entre los que destaca la de Marcelo Ebrard, por lo que de inmediato se llamó a sus suplentes.
Ni la Corte puede detener el proceso
El coordinador de Morena en el Senado, Adán Augusto López Hernández, demeritó la consulta que realiza la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que el pleno pueda determinar que se suspenda el proceso de discusión y aprobación de la reforma judicial.
“Conocen nuestra posición. Creemos que no tienen facultades ni una jueza ni una magistrada, y sostenemos que tampoco la SCJN para parar el proceso legislativo”, dijo en entrevista en un hotel de Revolución antes de abordar un autobús para sesionar en una sede alterna.
Oposición
Por su parte, los legisladores del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano (MC) se alinearon en contra de la reforma presidencial, después de que la organización Marea Rosa realizó el democratómetro, que fue una lista con los nombres de los 43 senadores opositores y donde fueron señalando uno a uno su rechazo al proyecto presidencial.
Las bancadas de Morena y aliados requieren solo de un voto de la oposición para aprobar la minuta que ya fue avalada los pasados martes y miércoles por los diputados federales en una sede alterna.
El legislador Daniel Barrera (MC) fue el último en dar su posicionamiento en contra del dictamen y reiteró que es el más interesado en que se concrete una reforma judicial pero no la que propone Morena.
Denuncian ofertas para “chapulinear”
El presidente del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, denunció amenazas “brutales”, intimidación y cañonazos de millones de pesos para que senadores y senadoras de su grupo parlamentario se sumen al oficialismo, voten a favor o se ausenten de la discusión de la reforma al Poder Judicial.
Señaló que sus legisladores han recibido “ofertas de decenas de millones de pesos para migrar a la bancada morenista o ausentarse de la votación; amenazas de uso faccioso de las fiscalías en contra de las y los legisladores y de sus familias, y hasta presiones del Instituto Nacional Electoral (INE)”.
Beltrones va en contra
El senador del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Manlio Fabio Beltrones, confirmó que asistirá a la sesión plenaria del próximo miércoles y votará en contra de la reforma judicial.
En redes sociales, enfatizó que la reforma que impulsa Morena “no es la que necesita México”.
“Como lo he mencionado en anteriores ocasiones y hoy que he releído la minuta que ha llegado al @senadomexicano, reafirmo mi convencimiento total de que ésta no es la reforma que México necesita.
“Siempre he sostenido que hay que fortalecer a las instituciones, no debilitarlas, por lo que reitero que, en su momento, asistiré a la sesión en donde se discuta y votaré en contra”, puntualizó.
Al menos 820 magistrados de Circuito y jueces de Distrito del país solicitaron la intervención “urgente” del Comité de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ante los graves daños a sus derechos humanos que dijeron podría causarles la reforma judicial, aprobada por la mayoría de Morena y sus aliados en la Cámara de Diputados.
De manera concreta, los juzgadores pidieron que, en el marco de sus respectivos mandatos, pidan a México que suspenda el trámite legislativo de la propuesta judicial o, en su caso, se suspenda su ejecución.