La elaboración de un tratado mundial para luchar contra pandemias como la del COVID-19 va a tener que esperar. Tras más de dos años de negociaciones, los países ricos y pobres han fracasado —por ahora— en su intento de llegar a un plan sobre cómo podrían responder de manera conjunta ante la próxima pandemia.

Después de que la pandemia desencadenara encierros impensables, trastornara las economías y matara a millones de personas, los dirigentes de la Organización Mundial de la Salud y de todo el mundo se comprometieron a hacerlo mejor en el futuro. En 2021, los países miembros pidieron a la agencia sanitaria de la ONU que supervisara las negociaciones para determinar cómo el mundo podría compartir mejor los escasos recursos e impedir que futuros virus se propaguen por todo el planeta.

Roland Driece, copresidente de la comisión negociadora de la OMS para el acuerdo, reconoció el viernes que los países no habían sido capaces de presentar un borrador. La OMS esperaba que en la reunión anual de ministros de Salud, que comienza el lunes en Ginebra, se llegara a un acuerdo sobre el borrador final del tratado.

“No estamos donde esperábamos estar cuando iniciamos este proceso”, dijo, y añadió que finalizar un acuerdo internacional sobre cómo responder a una pandemia era fundamental “por el bien de la humanidad”.